Donald Trump vuelve a tensar la cuerda de las relaciones comerciales con China. A las tarifas que ya están en vigor, hay que sumar el reciente anuncio de la oficina de Comercio Exterior de Estados Unidos de la entrada en vigor de un arancel del 10% a una lista de 5.745 productos chinos valorados en 200.000 millones de dólares.
A principios de semana, los inversores ya mostraban su inquietud sobre el anuncio de una nueva ronda de aranceles sobre China. Muestra de ellos es que, según señala WisdomTree, que “los ETPs sobre oro registran los primeros reembolsos en cinco semanas. Además, la semana pasada se reembolsó un total de 71,4 millones de ETPs de metales industriales”.
En su opinión, los inversores temen una caída de la demanda como resultado de la guerra comercial actual. Los aranceles anunciados se suman a los 50.000 millones dólares que ya hay en impuestos a otro grupo de bienes. “En este contexto, los inversores parecen temer de que las medidas de represalia mutua que ambas partes toman en esta guerra comercial, afecte a la demanda económica mundial”, advierte.
De hecho, según estiman desde ING, el porcentaje del comercio mundial afectado por los nuevos aranceles subió al 2,5%, pero podría aumentar. “Hasta hoy, el porcentaje del comercio mundial directamente afectado por toda la guerra comercial era aproximadamente del 1%. Ahora se ha elevado al 2,5%, y si los Estados Unidos llevan a cabo su amenaza de imponer aranceles sobre el resto de sus importaciones de China, esto equivaldrá aproximadamente al 4% del comercio mundial. Aunque este porcentaje puede parecer pequeño, los aranceles afectarán las cadenas de suministro chino-estadounidenses y, por lo tanto, pueden triplicar los efectos sobre el comercio mundial”, explica Timme Spakman, economista y analista de comercio internacional de ING.
En cambio, Renta 4 se muestra más optimista y apunta que el mercado sigue manteniendo la expectativa de que ambas partes, China y Estados Unidos, vuelvan a la mesa de negociación y cese la tensión dialética. Tras el lunes de los nuevos aranceles por parte de Trump, “la reacción de los mercados chinos ha sido, en contra de lo que habría que esperar (Shangai Composite +1,25%), mientras que los futuros del S&P +0,10% y los del Eurostoxx planos, entendemos que ante la expectativa de que las partes negocien”, apunta la gestora en su último análisis de mercado.
Pero, ¿qué sigue impulsado esta guerra comercial? En opinión de Joseph Mouawad, gestor del Carmignac Portfolio Emerging Patrimoine, en esto tiene mucho que ver las próximas elecciones legislativas en Estados Unidos, que se celebrarán en menos de dos meses. “Es muy problable que toda esta guerra dialéctica que estamos viendo en torno a la guerra comercial y China tenga tengo un motivo electoral por parte de Donald Trump, cara a los próximos comiciones. Considero que después de noviembre veremos como esta situación se relajará”, apunta Mouawad.
Por el momento, la respuesta de China no se ha hecho espera y ya ha aranceles a Estados Unidos por valro de 60.000 millones de dólares. Pese al anuncia, el gigante asiático ha insitido en que la única salida a al guerra comercial contra Estados Unidos es el diálogo. “El problema solo puede solucionarse a través del diálogo basado en la igualdad, la buena voluntad y el respeto mutio”, afirmó en rueda de prensa el portavoz del Ministerio de Asuntos Esteriores chino, Geng Shuang.