Spectrum Markets, el centro de negociación paneuropeo de derivados titulizados, ha publicado sus datos de sentimiento del SERIX para los inversores minoristas europeos correspondientes al mes de agosto, revelando un fuerte respaldo a la libra esterlina. El valor del SERIX indica el sentimiento de los inversores minoristas, con un número superior a 100 que indica un sentimiento alcista, y un número inferior a 100 que indica un sentimiento bajista.
Según explican, esto se puede ver en comparación con el dólar estadounidense, aunque es incluso más fuerte este respaldo frente al euro, donde el par de divisas euro/libra alcanzó un mínimo histórico de 54 puntos desde la introducción de los datos de sentimiento SERIX en 2019.
En su opinión, el fuerte sentimiento que hubo sobre la libra en agosto podría haber sorprendido a algunos, ya que ha sufrido los efectos de varias noticias macroeconómicas negativas recientes. Entre ellas, destacan, el hecho de que el Reino Unido haya alcanzado el nivel de inflación más alto en más de 40 años, los precios de consumo más altos de la historia y las huelgas que se están llevando a cabo en numerosos sectores, ya que los empleados exigen mayores aumentos salariales para seguir el ritmo de la inflación.
“Hay dos posibles acontecimientos que podrían haber contribuido a un sentimiento más bien optimista hacia la libra. Uno es el enfoque decisivo adoptado por el Banco de Inglaterra, que actualmente está luchando contra la inflación con subidas de los tipos de interés y ha subido su tipo clave en varias ocasiones, la última hasta el 1,75%. La otra razón podría tener una motivación más política», explica Michael Hall, jefe de distribución de Spectrum Markets.
De cara a principios de septiembre, Hall indica que los inversores podrían haber estado valorando que con la dimisión de Johnson, una parte de la incertidumbre se desvanece en el mercado. “Es posible que muchos inversores minoristas europeos hayan percibido la administración de Johnson como plagada de escándalos y errática, y esperen que las caras nuevas en el gobierno contribuyan a un programa económico más pragmático y exitoso, que acabe dando lugar a una moneda más estable”, añade.