Este primer mes del año deja buenas expectativas para los inversores. Según la Encuesta a Inversores Institucionales de Schroders, los inversores institucionales en Norteamérica esperan obtener unas rentabilidades más elevadas este año. Así lo cree más de la mitad de ellos, que esperan obtener un rendimiento superiores al 7%, en comparación con lo que piensas sus homólogos europeos.
Más de la mitad de los inversores institucionales norteamericanos, un 54%, busca unas rentabilidades de al menos el 7%, en comparación con el 40% de sus homólogos europeos. Los inversores latinoamericanos también se mostraron optimistas: el 55% esperaban lograr una rentabilidad de al menos el 7%.
En cambio, los inversores europeos adoptaron una actitud más prudente: el 30% de ellos prevé unas rentabilidades entre el 1% y el 4%. Este porcentaje duplica la proporción de inversores norteamericanos que esperan el mismo nivel de rentabilidad. Los inversores institucionales en Europa y Asia también mostraron unas expectativas dispares en comparación con los inversores del continente americano.
No obstante, los inversores europeos se mostraron notablemente más confiados en cuanto al logro de su modesto objetivo de rentabilidad: el 61% espera alcanzar sus objetivos de inversión, en comparación con el 46% de los inversores en Norteamérica. A escala global, el 54% de los inversores están seguros de lograr sus objetivos de rentabilidad. Al mismo tiempo, algo más de un cuarto de los inversores a escala global (28%) admitieron que habían incrementado su asignación a activos monetarios.
Los inversores norteamericanos también se mostraron preparados para ser pacientes de cara a alcanzar sus objetivos de rentabilidad más ambiciosos. Casi dos tercios, el 61%, están dispuestos a mantener su estrategia durante, al menos, cuatro años, en comparación con el 53% de los inversores europeos. Los inversores institucionales asiáticos presentaban el horizonte de inversión más reducido: el 51% admite que espera cambiar sus estrategias de inversión en un plazo de cuatro años.
Focos de atención
A escala global, los inversores destacaron la política monetaria —la perspectiva de subidas de los tipos de interés y la retirada de las políticas de expansión cuantitativa—, dado que los asuntos macroeconómicos tendrán las mayores repercusiones sobre la rentabilidad de las carteras. Si bien la seguridad de la información ha pasado a ser una preocupación cada vez más generalizada, solo un 17% de los inversores mencionaron los ciberataques como un problema potencialmente importante para la inversión.
Los acontecimientos geopolíticos y el auge del populismo han dominado el razonamiento de los inversores en los últimos dos años, y todo parece indicar que esta temática seguirá mostrando una especial solidez en el continente americano. Casi dos tercios de los inversores norteamericanos (el 63%) y algo más de la mitad de los latinoamericanos (el 52%) esperan que los acontecimientos geopolíticos y el populismo tengan mayores repercusiones en el proceso de toma de decisiones de inversión en comparación con hace 12 meses.
Si bien sigue siendo un factor para ellos, los inversores institucionales europeos y asiáticos se mostraron más optimistas en cuanto al desarrollo del plano geopolítico y el populismo: el 45% y el 38% de los inversores en estas regiones, respectivamente, consideran que estos asuntos acapararán una mayor atención.
Según Charles Prideaux, responsable de Soluciones de inversión en Schroders, comentó, “la política monetaria se encuentra, con razón, al frente del razonamiento de los inversores después de muchos años de tipos de interés reducidos y abundante liquidez. Destaca especialmente la Reserva Federal estadounidense, que ha empezado a retirar su programa de expansión cuantitativa y está subiendo sus tipos”.
En su opinión, es asombroso que muchos inversores en Norteamérica y Latinoamérica presenten objetivos de inversión de, al menos, un 7%. En cambio, sus homólogos en Europa y Asia han adoptado unas perspectivas más conservadoras. “No parece que este difícil panorama de inversión vaya a remitir, lo que hace que sea cada vez más importante que en Schroders colaboremos estrechamente con nuestros clientes institucionales para estructurar carteras diversificadas y ofrecer soluciones que optimicen el riesgo y las rentabilidades de cara a lograr sus objetivos”, concluye Prideaux.