Los gestores de fondos parecen haber recuperado el buen ánimo. Según las conclusiones que arroja la edición de febrero de la encuesta global elaborada por Bank of America, su sentimiento es el más optimista en dos años y los niveles de efectivo se han reducido al 4,2%, ya que las expectativas de crecimiento mundial también han alcanzado su máximo en dos años.
“En febrero, la confianza mejoró hasta alcanzar el nivel más alto en más de dos años. Nuestra medida más amplia del sentimiento de los gestores de fondos, basada en los niveles de efectivo, la asignación a renta variable y las expectativas de crecimiento económico, subió de 2,9 a 4,1”, indica la entidad. Según destacan, el 25% de los encuestados espera una economía más fuerte en los próximos 12 meses.
En este sentido, una posible recesión ha dejado de considerarse un riesgo para este año y los gestores de fondos señalan el aumento de la inflación, la geopolítica, un evento crediticio sistémico, un aterrizaje brusco de la economía, las elecciones en EE.UU. y una crisis bancaria en China como los mayores riesgos de cola de 2024.
Para BofA, resulta relevante que unas expectativas fuertes sobre la macroeconomía y la ausencia de una recesión mantengan a los inversores en el bando del aterrizaje suave en el 65% de los casos, mientras que la probabilidad de un aterrizaje duro se reduce al 11%. “Obsérvese también que está aumentando el porcentaje de inversores que esperan un aterrizaje suave, hasta el 19%, frente al 7% de enero y ahora por encima del porcentaje que espera un aterrizaje brusco”, apunta las conclusiones de la encuesta.
En cuanto a la política económica, la encuesta muestra que la bajada de los tipos de interés es el catalizador del optimismo: sólo el 4% espera una subida de los tipos a corto plazo, sólo el 7% espera una mayor inflación y el 85% afirma que la curva de rendimientos se inclinará. “Cabe señalar que el 46% de los encuestados afirma que la política fiscal es demasiado estimulante”, destacan desde BofA.
Fruto de esta visión más optimista, la menor percepción del riesgo llevó a los inversores a reducir sus niveles de liquidez hasta el 4,2% en febrero, desde el 4,8% de enero, lo que supone un descenso de 55 puntos básicos intermensuales. “Cabe señalar que los descensos anteriores de más de 50 puntos básicos intermensuales en los niveles de liquidez fueron seguidos de subidas de la renta variable del orden del 4% en los 3 meses siguientes”, matiza el documento.
La posición de las carteras
Además de reducirse el efectivo en las carteras, se observa que la asignación a acciones estadounidenses es la más alta desde noviembre de 2021, destacando el sector tecnológico. En concreto, la encuesta muestra que “los 7 magníficos” sigue siendo la operación más concurrida.
Sobre los cambios en la asignación de activos en las carteras se observa, en comparación con el mes anterior, que los gestores de fondos se decantaron por las telecomunicaciones, la renta variable, la y EE.UU.. Y, en cambio, redujeron su exposición a los mercados emergentes, los REITs, la energía, los bancos y los servicios públicos.