El crecimiento es uno de los catalizadores más importantes para la renta variable, pero es clave saber en qué momento del ciclo de crecimiento conviene entrar en cada mercado. Porque no siempre crecimiento pasado va acompañado de rentabilidad futura. Sobre todo, en los países emergentes: según un estudio de Credit Suisse (Crédit Suisse Global Investment Returns Yearbook 2014), recogido por Morningstar, los países que han tenido fuertes crecimientos en el pasado suelen obtener peores rentabilidades en el futuro que aquellos que, en el pasado, han mostrado un crecimiento más débil. También ofrecen más retornos aquellos con una mayor debilidad de sus divisas.
Una de las razones que ofrece Credit Suisse para demostrar que el crecimiento pasado suele llevar a menores rentabilidades futuras es que “toda la información está ya descontada en el precio” al que cotizan esos mercados, lo que hace que los inversores compren a niveles caros y su rentabilidad futura sea menor. “La explicación más plausible es que un periodo de bajo crecimiento económico para un país, o un periodo de debilidad en sus divisas, es simplemente un reflejo del efecto de valor que ofrece. Un crecimiento y divisa débiles van ligados a mercados distressed y de alto riesgo, de modo que los inversores demandan una mayor prima”, y de ahí los mayores retornos futuros.
Otra explicación se encuentra en el comportamiento de los inversores, que evitan este tipo de países o piden altas primas para invertir en ellos, mientras pagan de más, y de forma entusiasta, por los mercados que más crecen. Debido a ello, los mercados de mayor crecimiento son más difíciles de explotar, puesto que se encarecen más rápidamente.
Rentabilidad por dividendo
A la hora de seleccionar los mercados emegentes en los que invertir, y además de elegir países con un menor crecimiento pasado y divisas más débiles, el estudio muestra que también conviene seleccionar en función de la rentabilidad por dividendo ofrecida: en este sentido, aquellos países con mayor rentabilidad por dividendo son también más rentables. También conviene tener en cuenta el crecimiento futuro: aquellos con mayores y mejores perspectivas podrían ofrecer también más retornos.
Oportunidad a pesar de la crisis
A pesar de la crisis que atraviesan estos mercados, Credit Suisse insiste en que “son demasiado importantes para ser ignorados”. Y recuerda que si hace 30 años suponían el 1% de la capitalización bursátil mundial y el 18% del PIB, actualmente suponen el 13% del universo de inversión en renta variable de todo el mundo y el 33% del PIB mundial. “Esos pesos crecerán de forma constante en la medida en que los emergentes seguirán creciendo más rápidamente que el mundo desarrollado, se irán abriendo a los inversores globales y aumentarán su free float”.