Los bancos mediterráneos vuelven a representar una atractiva oportunidad de inversión, incluso los de países como Grecia, que sufrieron la crisis de deuda, asegura Colin Finlayson, cogestor del Aegon Strategic Global Bond Fund.
Ante el repunte de la inflación, Finlayson observa que los inversores en renta fija están intentando invertir en sectores que puedan comportarse bien en un entorno difícil para los bonos y que, con frecuencia, se decantan por el sector financiero frente al de las empresas de suministros públicos (utilities) o el sector industrial, que ofrecen rendimientos más bajos. Sin embargo, el experto cree que a algunos inversores puede sorprenderles qué áreas del mercado empiezan a ofrecer oportunidades tras años fuera de juego.
«La deuda bancaria tiende a comportarse bien en un entorno inflacionario o cuando suben los tipos de interés», explica Finlayson. «Unas curvas de tipos más empinadas y una mayor actividad económica benefician a los bancos que, además, ofrecen rendimientos algo más altos que otros sectores como las utilities. Por eso estamos expuestos al sector financiero y nos decantamos por el high yield frente al grado de inversión, aunque en áreas menos tradicionales en algunos casos».
Una de estas áreas es el sector bancario griego que, en opinión del gestor, resulta atractivo con independencia de la recuperación económica mundial.
«Los bancos griegos se han esforzado por sanear sus balances y se han deshecho de un montón de préstamos tóxicos. Para ello, han contado con el respaldo tanto del gobierno heleno como del BCE y han progresado mucho desde los momentos más duros de la crisis de deuda soberana».
«Ahora, los bancos griegos resultan atractivos y ofrecen valor en comparación con muchas otras partes del sector bancario. Aun así, es importante que los inversores lleven a cabo un análisis fundamental para entender bien lo que están comprando y los riesgos que asumen para obtener un determinado nivel de spread. Nosotros tenemos bonos de Alpha Bank y Piraeus Financial, que hace poco lanzó una nueva emisión a niveles interesantes».
Finlayson también considera que los bancos españoles e italianos son una buena opción en el entorno actual. De hecho, las entidades financieras de ambos países tienen una presencia importante en la cartera de bonos estratégicos que cogestiona. «Nos gustan Intesa Sanpaolo y Unicredit en Italia, y Banco Sabadell y BBVA en España».
«Estos bancos ofrecen buenas oportunidades de inversión pero, en Europa, tienes que buscar un poco más para encontrarlas porque hablamos de países, jurisdicciones y estructuras de capital diferentes. Aun así, las oportunidades existen y nosotros intentamos invertir en las mejores», concluye.