El dólar será un activo seguro y reflejará el repunte de la saneada economía estadounidense a medida de que avance el verano boreal, asegura el análisis de la institución especializada en intercambio de divisas, Ebury.
“A medida que nos adentremos en los meses de verano, asistiremos a una interacción entre el doble papel del dólar como activo seguro e indicador de la salud económica de EE.UU.”, dice el comunicado emitido por la empresa.
Además, aseguran que el informe sobre las nóminas de junio donde se desprende que se recuperaron 4,8 millones de puestos de trabajo en EE.UU., algo que superó ampliamente las expectativas.
Sin embargo, estos números deben ser vistos con cautela debido a que las nóminas de junio relevan datos hasta mediados de mes por lo que no está contemplado un posible revés ante el aumento de cifras de contagio y el retroceso en las medidas de reapertura.
De todas maneras, Ebury destaca que no se ha visto una reacción negativa del dólar ante este último escenario de la pandemia en el gigante norteamericano.
Por otra parte, los activos de riesgo mundiales “continúan comportándose sin una pauta clara, con el repunte de las acciones, el crédito y el petróleo a los niveles actuales” y las noticias económicas que llegan de la mayoría de las principales zonas monetarias “siguen sorprendiendo al alza”.
Las divisas del Grupo de los diez (G10) son las que mejor se han comportado esta semana, pero se destaca un repunte del peso colombiano dentro de las latinoamericanas. Mientras, el rublo ruso tuvo una depreciación “consecuencia de la inestabilidad provocada por las sanciones de EE.UU. y el pago de dividendos de la estatal Rosneft.
En cuanto a las principales monedas como la libra esterlina y el euro continúan superando las expectativas.
La moneda de Gran Bretaña superó la semana pasada la preocupación en torno al Brexit y tuvo un salto en comparación con el euro y el dólar, reseña el informe.
La zona euro por su parte, sigue “superando las expectativas”: la actividad empresarial subió en junio más de lo esperado (48,5%). Si bien un número inferior a 50 “se corresponde históricamente con una contracción” es posible que el escenario actual haga que los niveles absolutos sean menos rigurosos.