Este martes 5 de noviembre se cerrarán las elecciones de EE.UU. y quién comandará la Casa Blanca es un gran interrogante. Si bien Donald Trump cuenta con un leve favoritismo por las casas de apuestas, lo que más le importa a la industria financiera es que los resultados se conozcan lo más rápido posible y que no exista una impugnación.
Con este contexto, los representantes del buy side de Miami analizan los posibles escenarios y cómo las elecciones podrían afectar a los inversores.
Ignacio Pakciarz, founder y CEO de BigSur Partners respondió que espera un “Red sweep” donde los Republicanos ganen el ejecutivo y ambas cámaras en el Congreso.
“Esto lo decimos en base principalmente al mercado de apuestas y a una cantidad de indicadores financieros que señalan consistentemente este resultado”, respondió el experto.
Según Pakciarz, el mercado reaccionará con un pequeño “relief rally” de 2 o 3% solo por la eliminación de la incertidumbre eleccionaria siempre y cuando no haya un “contested election”, que sería el peor escenario. Por otro lado, para el directivo de BigSur ,“el mejor resultado sería un gobierno dividido».
Alejandro Behrens, managing director en MAXIMAI Investment Partners comentó que espera un “elección altamente reñida” que dependerá de los swing states.
Behrens alerta que “el mercado reaccionará dependiendo de la claridad y rapidez con la que se conozcan los resultados”. Coincidió en que también dependerá de qué tan balanceado quede el gobierno tomando en cuenta los resultados del senado y de la cámara de representantes.
“Usualmente los mercados tienden a preferir un gobierno más dividido. Para mi el mejor resultado para las inversiones va a ser uno en el cual se conozca rápidamente quién es el ganador. Creo que el peor sería un escenario en el cual existan dudas y que se prolongue varios días o inclusive semanas antes de conocerse quién será el nuevo presidente. Esto definitivamente no sería positivo para los mercados y causaría mucha incertidumbre”, reflexionó.
Fernando de Frutos, Chief Investment Officer de Boreal Capital Management planteó tres escenarios que podrían afectar al mercado.
En primer lugar, quién gane finalmente y cuánto se haya anticipado ese resultado. En segunda instancia, si el partido perdedor impugna los resultados; y por último, cómo quedará conformado el Congreso.
Según De Frutos, actualmente, los mercados de predicción muestran a Trump con una ligera ventaja y alrededor de un 30% de probabilidad de un “Republican sweep”. Sin embargo, “esta ventaja ha ido disminuyendo y las encuestas indican una carrera muy reñida”, aclaró.
Con estos posibles panoramas, para el CIO de Boreal Capital Management, un “Republican sweep” podría ser positivo para las acciones a corto plazo, pero podría afectar a los bonos, ya que los déficits y los aranceles podrían llevar a un aumento de los tipos de interés, lo que, a su vez, podría ejercer presión a la baja sobre las acciones.
En este sentido, de Frutos aclaró que “los inversores generalmente valoran toda la información disponible, pero el impacto de las políticas fiscales y económicas a menudo se manifiesta con el tiempo y puede no influir en los mercados de manera inmediata”.
Sin embargo, los efectos de políticas relacionadas con la regulación, los aranceles y los impuestos tienden a ser más inmediatos, explicó el experto que recordó como el «Trump trade» en 2016 es un claro recordatorio de cómo los mercados pueden reaccionar rápidamente ante los cambios de políticas.
Recomendaciones al inversor
Es sabido que las épocas electorales dan volatilidad e inseguridad a los inversores. Por este motivo, los asesores financieros tienen que tener muy claras las recomendaciones para sus clientes.
En ese aspecto, BigSur Partners, “estuvo priorizando la sana rotación hacia sectores con buenos niveles de valuación”. Según Pakciarz, estos sectores van a ser beneficiados por la desregulación que traería un gobierno de Trump.
Behrenrs, por su parte, trabajó para que sus clientes mantuvieran “la calma y continuaran con un enfoque a largo plazo independiente de los resultados electorales”.
De Frutos por su parte cree que más allá de “la reacción inmediata del mercado” independientemente del resultado electoral, EE.UU. seguirá siendo uno de los mercados más atractivos para los inversores.
El experto destacó que para los clientes con un horizonte de inversión a medio o largo plazo, “estas elecciones son básicamente ruido de fondo” y recordó que históricamente, las bolsas han subido tanto con presidentes republicanos como demócratas, y “quedarse fuera del mercado puede ser costoso a largo plazo”.
“Dado que la reacción del mercado tras las elecciones es notoriamente difícil de prever, no recomendamos hacer ajustes drásticos únicamente en función de los resultados de las elecciones”, concluyó.