La última década fue una década perdida para la eurozona pero ahora los números vuelven a acompañar y la oportunidad de invertir en su renta variable está sobre la mesa. Así lo defiende en esta entrevista con Funds Society, Olivier de Berranger, CIO de La Financière de l’Echiquier, convencido de que también hay buenas oportunidades en los bonos corporativos híbridos y los flotantes. En su opinión, los mayores riesgos están en la esfera geopolítica y también en las políticas monetarias en EE.UU.
¿Qué grandes tendencias veis en los mercados de cara a 2018?
2018 debería ser un año de regreso a las acciones europeas. La última década fue una década perdida para la eurozona. Después de casi 10 años de una tasa de sub-crecimiento en términos de PIB a nivel macroeconómico y de beneficios por acción a nivel microeconómico, Europa parece haberse estabilizado finalmente. El riesgo político se ha reducido, si es que no ha desaparecido.
Del cero al 10… ¿en qué nivel de riesgo valorarías para los mercados las políticas de normalización monetaria este año? ¿y la posibilidad de normalización de los niveles de volatilidad? ¿Y el riesgo geopolítico?
En EE.UU., los inversores son actualmente conscientes del riesgo de inflación, impulsado por el crecimiento de los salarios. La Fed debería subir los tipos y el riesgo es una sobreconfianza en la fortaleza de la economía. El riesgo es 6.
En Europa, el BCE anunciará pronto el fin del QE para el último trimestre. No habrá subidas de tipos antes de 2019, por lo que el riesgo es 4.
A nivel geopolítico global el riesgo está más concentrado en una potencial guerra comercial. Una decisión no racional siempre es posible y el riesgo es 8.
La volatilidad regresará al mercado pero es más que un proceso de normalización. En 2017, el S&P 500 tuvo un movimiento diario de +/- 1% ocho veces. A mediados de abril de este año, ya hemos tenido 28 días como esto. Vemos que, con el regreso a la normalidad, el riesgo es sólo de 4.
Dentro de la renta fija, veis aún valor en algún segmento de mercado?
Nos atenemos a los bonos corporativos, pero con políticas de cobertura y por tanto la duración no excederá los dos años en nuestras carteras. Los bonos corporativos híbridos y los bonos flotantes indexados a largo plazo siguen siendo atractivos.
En este sentido, qué tendencias serán claves a vigilar en las carteras de cara a este año? ¿Cuáles y dónde están son los principales riesgos de pérdidas? ¿Y las mayores oportunidades?
Vemos mucha negociación en la bolsa de EE.UU., los bonos soberanos o la deuda financiera subordinada. Creemos en algunas megatendencias, el hipercrecimiento a través de la tecnología, por ejemplo, que es una fuerte convicción de los fondos Echiquier World Equity Growth.
Las pequeñas y medianas empresas europeas son todavía una clase de activo atractiva que ofrece exposición a mercados nichos y modelos de negocio que cambian las reglas del juego. Echiquier Agenor, fondo de renta variable growth de mediana capitalización, ha experimentado una significativa mejora de sus rendimientos desde 2014.
¿Qué perspectivas manejáis para la renta variable? ¿Seguirán subiendo las bolsas sin descanso, es viable ese escenario?
Como he señalado anteriormente, creemos que la inversión en el mercado de valores europeo sigue siendo bueno este año, incluso aunque el rendimiento no será tan espectacular como el año pasado. La descorrelación entre las acciones está volviendo después de años de comportamiento altamente correlacionado. Los datos individuales de las empresas europeas y el crecimiento de los beneficios por acción debería ser un buen campo de juego para los stock-pickers.