Los flujos de inversión hacia productos cotizados (ETPs, por sus siglas en inglés) se moderaron en agosto, según refleja el informe mensual de BlackRock: la entrada de inversión hacia ETPs mundiales se ralentizó desde los 90.100 millones de dólares de julio hasta los 65.300 millones. Esta desaceleración respondió, según la firma, a una caída en las suscriciones de productos tanto de renta variable como de renta fija.
En concreto, los flujos de renta variable cayeron a 45.700 millones de dólares en agosto, frente a los 60.500 millones de julio, mientras que las compras de renta fija disminuyeron a 22.300 millones de dólares, frente a los 32.100 millones del mes anterior. Peores números presentaron los flujos de inversión en materias primas, puesto que mostraron salidas por 3.200 millones de dólares.
Los tipos impulsaron el 83% de las compras de ETPs de renta fija en agosto, con 18.500 millones de dólares, por encima de la media trimestral del 46% de mayo a julio. Como es habitual, la exposición a Estados Unidos lideró las compras (15.300 millones de dólares). Profundizando en los flujos de tipos estadounidenses, el estudio revela que en agosto se produjo una notable ralentización de las compras de duración: las asignaciones se inclinaron claramente a favor de los productos a corto plazo, con 7.600 millones de dólares añadidos, casi 4 veces los niveles de julio.
Las compras de bunds también han sido favorables durante el verano, puesto que en agosto alcanzaron los 800 millones de dólares y se registraron las mayores entradas desde marzo de 2020, que se sumaron a las compras netas de 500 millones de dólares de julio. Más allá de los mercados desarrollados, los ETP sobre deuda de mercados emergentes registraron salidas netas por valor de 300 millones de dólares tras cuatro meses de entradas entre abril y julio (7.300 millones de dólares).
En el resto de la renta fija, agosto fue testigo de una fuerte presión vendedora. El crédito high yield registró reembolsos por 1.600 millones de dólares y los bonos ligados a la inflación, por 1.900 millones. Hubo flujos planos hacia el crédito con grado de inversión. Sin embargo, estos flujos no han hecho más que hacer mella las fuertes compras de crédito de este año, puesto se se han añadido posiciones este año en crédito con grado de inversión por 30.500 millones de dólares de enero a julio.
Los sectores defensivos, a la cabeza
Los flujos sectoriales de agosto mostraron una tendencia defensiva, encabezada por la tecnología y la sanidad, según el informe de BlackRock. El sector tecnológico impulsó las entradas durante el verano, con 17.200 millones de dólares de mayo a julio y otros 12.200 millones en agosto. Con un total acumulado de 33.000 millones de dólares de entradas hasta la fecha, los flujos del sector tecnológico ya han superado los 26.000 millones de dólares añadidos en 2022, lo que sitúa al sector en camino de ser el más popular por quinto año consecutivo. Las compras en el sector sanitario también volvieron en agosto (1.800 millones de dólares).
En cuanto a los flujos hacia sectores cíclicos, las salidas en el sector financiero (3.300 millones de dólares) anularon con creces las entradas de julio por 2.400 millones de dólares, lo que sugiere que quizá sea demasiado pronto para hablar de un cambio de tendencia, según desgranan en la firma. El sector energético registró salidas moderadas (-0,1 millones de dólares), después de que las entradas de julio (1.200 millones de dólares) indicaran que los inversores podrían estar volviendo al sector tras siete meses de reembolsos.
El value tuvo una buena acogida, con entradas de 1.300 millones de dólares en agosto, que se sumaron a los 1.500 millones acumulados en junio y julio. En línea con la tendencia observada en los sectores, la calidad recibió entradas por valor de 2.600 millones de dólares, tras registrar salidas en julio (-0.400 millones de dólares). La calidad sigue siendo el factor de exposición más popular este año, con 23.500 millones de dólares añadidos hasta la fecha, en camino de convertirse en el año con mayores entradas registradas.
Los flujos de renta variable de los mercados desarrollados dejan paso a los mercados emergentes
Las compras de renta variable estadounidense impulsaron los flujos regionales a lo largo de junio y julio, al suponer más del 60% los flujos regionales, pero cayeron bruscamente en agosto, hasta alcanzar los 11.100 millones de dólares, es decir, el 24% del total, dando paso a fuertes compras de renta variable de mercados emergentes. en esta área, las suscripciones totalizaron 21.500 millones de dólares. Agosto marcó el tercer mayor mes de entradas registrado para los ETP de renta variable de emergentes, tras diciembre de 2019 (23.100 millones de dólares) y enero de 2022 (21.700 millones de dólares). Los flujos de entrada de renta variable de mercados emergentes han sido notablemente persistentes en 2023 hasta ahora, con 88.700 millones de dólares añadidos hasta la fecha y cinco de los ocho meses naturales con más de 10.000 millones de dólares de entradas netas.
Por el contrario, los flujos hacia la renta variable de mercados emergentes han sido relativamente irregulares este año: la inversión hacia bolsa japonesa aumentó en agosto desde los 2.600 millones de dólares en julio hasta los 3.600 millones en agosto, pero el impulso ha disminuido desde junio (7.800 millones de dólares). Los ETP sobre renta variable japonesa cotizados en Estados Unidos captaron 600 millones de dólares, mientras que las exposiciones cotizadas en EMEA registraron un goteo de casi 100 millones de dólares. La renta variable europea siguió siendo poco apreciada, con un quinto mes consecutivo de salidas, esta vez, por 1.300 millones de dólares, que se suman a los 7.400 millones de dólares de salidas acumuladas de abril a julio. Esto ha anulado el 60% de las entradas de inversión registradas en el primer trimestre.
El oro pierde brillo
Los ETP sobre materias primas registraron un tercer mes consecutivo de salidas en agosto, esta vez por 3.200 millones de dólares, tras un total de 8.800 millones de dólares de salidas netas en junio y julio. Los metales preciosos siguieron siendo uno de los principales motores de las salidas en agosto, con ventas netas en los ETP sobre oro por 2.500 millones de dólares y plata, por 0,4 millones de dólares). De junio a agosto, los ETP sobre oro se desprendieron de 8.700 millones de dólares. Como resultado, 2023 parece ser otro año débil para la compra de oro, con flujos netos negativos de 7.600 millones de dólares hasta la fecha.
Por otra parte, otras exposiciones a materias primas también registraron salidas, con 1.800 millones de dólares en ETP sobre crudo. Las exposiciones a materias primas de mercados amplios fueron un punto positivo en agosto, con entradas de 0,3 millones de dólares.