La gran pregunta que todo economista se esfuerza en contestar en estos momentos es cuándo y cómo será la próxima recesión económica. Si bien parece existir cierto consenso respecto a que ésta se producirá en un período de tres a cinco años, la intensidad de la misma genera más incertidumbre.
Según Joachim Fels, asesor económico global de PIMCO, la próxima recesión tendrá una forma diferente a la anterior. Utilizando un plato para ilustrarlo, Fels ha dicho que “será más suave, pero más larga que la anterior”.
Para explicarlo, este experto afirma que nos encontramos ante el final de una era y entrando en una nueva marcada por la disrupción. “Hay varios factores que la determinan: el liderazgo económico y político de China, la irrupción de nuevos populismos y el proteccionismo económico que promueven, la evolución demográfica, los avances tecnológicos y la baja o nula rentabilidad del mercado financiero”, ha destacado Fels durante un encuentro informativo.
El bajo crecimiento económico unido a la baja inflación y a unos tipos de interés bajos conforman “la nueva neutralidad” de la economía global, según este experto. “La política económica va a dejar paso a la política fiscal como hemos visto en EE.UU. Y ya vemos en algunos países europeos que se mueven hacia una expansión fiscal”, ha destacado.
España, entre los países más perjudicados por la guerra comercial
Joachim Fels es conocido por haber vaticinado, durante la crisis financiera, que España sería la próxima Alemania en términos de crecimiento económico e incremento de la productividad. Lo que entonces era una afirmación aventurada ha acabado por convertirse en realidad y Fels afirma hoy que “España ha sido una historia de éxito en los últimos cinco años. Ha ganado competitividad y vamos a seguir viendo el impacto de las reformas llevadas a cabo”.
Sin embargo, en su opinión, hay un desafío importante para la economía española. “Si la guerra comercial se intensifica España va a verse perjudicada”, afirma. Entre los motivos, la relación con los países latinoamericanos y el protagonismo de la industria de componentes y suministros para el sector automovilístico, entre otros.