Mapfre Economics, el servicio de estudios de Mapfre, ha reducido de forma considerable su rango de estimaciones para el PIB español y prevé una caída de entre el 12,1% y el 13,1% este año. Además, como novedad, no descarta que se mantenga la recesión durante el ejercicio que viene en un escenario estresado, con una contracción del 1,2%.
Precisamente, como apuntan los expertos de Mapfre Economics, “los riesgos para la economía se centran ahora en el nivel de recuperación de la actividad”, principalmente porque la vuelta a la normalidad se está produciendo de una forma gradual afectando principalmente al turismo y al ocio.
Todo esto tiene implicaciones sobre sus perspectivas en el mercado laboral. Según incluyen en su análisis, está aún por verse qué porcentaje de trabajadores en ERTE podrán volver a sus puestos de trabajo. “En la economía española, el turismo y la hostelería tienen un elevado peso, y seguramente estos sectores tardarán en volver al nivel de actividad anterior con los consecuentes efectos en el empleo”. Esto les lleva a prever una tasa de desempleo del 17,2% para 2020, pero que podría superar el 20% en 2021.
Sin embargo, los economistas de BBVA Research se muestran un poco más positivos y pronostican una caída del PIB un 11,5% en 2020 y un crecimiento del 7% en 2021. Según sus previsiones, la caída de los niveles de actividad podría sobrepasar el 20% en el acumulado del primer semestre del año respecto a finales de 2019.
Si bien, la reducción de los contagios y la flexibilización de las restricciones han dado paso a una recuperación intensa, desde BBVA Research consideran que la expectativa de que esta se prolongue se ve reforzada por los ambiciosos anuncios de política a nivel europeo y por un impulso fiscal significativo en España. “Esto abre la posibilidad a escenarios más positivos hacia delante. En todo caso, la incertidumbre todavía es elevada y la mayor parte de los riesgos siguen siendo a la baja”, aclaran.
Riesgos en la economía
Desde BBVA Research consideran que el principal obstáculo a la recuperación continúa siendo las dudas respecto a la evolución de la pandemia y la efectividad de las medidas tomadas para limitar de manera sostenida el contagio de la enfermedad.
A este respecto, consideran “prioritario” incrementar la capacidad del sistema sanitario para enfrentar posibles rebrotes, así como desarrollar medicamentos efectivos en el tratamiento y una vacuna que elimine definitivamente el riesgo de contagio. Asimismo, consideran clave trabajar en estrategias de contención utilizando las tecnologías más avanzadas, con las ventajas que da la información en tiempo real.
Fruto de la incertidumbre que genera el riesgo a rebrotes, desde BBVA observan como el gasto de las familias sigue siendo limitado. Algo que, unido a la situación del mercado de trabajo, impide que recuperemos niveles de consumo previos a la crisis.
“Un porcentaje elevado de la fuerza laboral está en una situación relativamente precaria: o tiene un contrato temporal, o está en un ERTE, o ha cesado actividad como autónomo o está en el paro. Por su parte, la incertidumbre también afecta a las empresas, lo que a su vez podría tener un impacto negativo sobre la inversión”, añaden.
Asimismo, consideran de particular importancia los efectos que tenga la pandemia sobre la estructura de costes, además de las dudas que pueda generar sobre el cambio en las preferencias de los hogares. “Todo lo anterior hará que la recuperación del gasto a niveles como los observados a finales del año anterior pueda retrasarse. En este entorno, el espacio y efectividad para las políticas de gasto público en España se va reduciendo”, advierten.
Por su parte, los expertos de Mapfre señalan varios riesgos para la economía. Por un lado, alertan sobre el elevado aumento de la deuda, posiblemente superando el 124% del PIB en 2020, pero también muestra su preocupación por el apalancamiento privado por las líneas de liquidez que se han activado. “Más adelante, habrá que ver en qué se traducen las garantías y avales del Estado concedidas al sector privado”, añaden.
Esto les lleva, a su vez, a prever un déficit fiscal que podría situarse por encima del 13% en 2020, por la caída de la recaudación, el aumento del gasto y la reducción del PIB. «Por último, habrá que ver el efecto final de las ayudas de la UE que finalmente vendrán en forma de préstamo y con una fuerte condicionalidad que llevará a reformas estructurales para equilibrar las cuentas públicas”, advierten.
La economía mundial
Mapfre Economics adelanta un escenario más sombrío para la economía mundial que hace tres meses, aunque también aprecia signos de reactivación en las principales economías, principalmente en China.
Contemplan un escenario base en el que auguran una recesión del 4,9% en 2020, pero seguido de un repunte relativamente ágil del 5,4% el próximo año, lo que permitirá recuperar el PIB perdido antes de terminar 2022. Más oprtimistas son las previsiones de BBVA Research, los cuales pronostican un crecimiento global desde del -3,2%.
Desde Mapfre, barajan también un escenario estresado en el que la recuperación se ve truncada por el rebrote y el agotamiento de las medidas fiscales. En este caso, la recesión se agravaría hasta el 5,7% y continuaría el año próximo (-2,2%). “En estos momentos, se trata de discernir si efectivamente la economía global ha tocado fondo en el segundo trimestre y si ahora, gracias a la implementación de medidas de política fiscal y monetaria, entramos en una gradual fase de normalización que lleve al terreno positivo el crecimiento a inicios del año próximo (escenario base)”, explican los economistas.