La perspectiva económica actual de América Latina está llena de incertidumbres y de nubarrones. “Sin embargo, también vemos aspectos positivos como el bajo apalancamiento público, grandes reservas internacionales, sólidos sistemas bancarios, tipos de cambio flexibles y costes laborales unitarios competitivos a nivel mundial, a los que se debe añadir una oferta de personal laboral cada vez más cualificada”, explica Gonzalo Cuadrado, analista financiero y gestor en EDM.
“Bajo la perspectiva de inversión que practicamos en EDM, no necesariamente tenemos que ser positivos sobre la macroeconomía de un país para decidir invertir en aquellos negocios que tienen una elevada exposición a ese país. Pensamos que es más importante tener en cuenta factores como el tipo de negocio, la cifra de exportaciones dentro del total de la cifra de ventas o la calidad del equipo directivo a la hora de adoptar su futura estrategia empresarial ante unas determinadas expectativas”, dice.
Además, bajo una perspectiva de horizonte de inversión a largo plazo y a la vez top-down, añade lo que denominan en la gestora “motores de crecimiento a largo plazo o megatendencias”, que son factores muy importantes a la hora de intentar identificar hacia dónde va una sociedad, un país o región, su economía, su demanda o su demografía.
En este sentido, para EDM invertir en Latinoamérica a través de una selección de buenos negocios implica tener exposición a interesantes fundamentales a medio y largo plazo. Y eso es lo que hace en su fondo de bolsa latinoamericana. ¿Cuáles son esos fundamentales?
En primer lugar, un bajo apalancamiento privado, que se une a una población muy joven, un enorme factor demográfico que juega a su favor, una baja penetración del crédito al consumo por el bajo desarrollo de los servicios financieros y al hecho de que ya hoy el poder adquisitivo de sus cinco mayores países es mayor que el de toda la clase media de China.
En segundo lugar, una multitud y diversidad de otras oportunidades de inversión debido a que América Latina arrastra serios déficits estructurales en materia de infraestructuras, servicios terciarios, tecnología y reducción de la pobreza, que si bien han mejorado notablemente en la última década, todavía lastran el crecimiento regional.
En cuanto a los valores de su fondo EDM Latin American EF, explican que la caída de cotizaciones se está debiendo a un incremento de la prima de riesgo exigida por los inversores, pero no está justificada por un empeoramiento de sus fundamentales. “Las compañías seleccionadas han realizado un buen trabajo: han seguido mejorando la rentabilidad de sus negocios y rebajado su endeudamiento. El hecho de que los inversores, en su mayoría, traten con sus flujos a todos estos mercados y valores por igual, significa una buena oportunidad para los “selectores de compañías”, que estamos viendo hoy tiempos mejores para realizar nuestro trabajo. Bajo el punto de vista de EDM, no es mal momento para la construcción cuidadosa de una cartera de valores de la región para un perfil de inversor claramente orientado al largo plazo”, explica Cuadrado.