La venta masiva causada por el brote de COVID-19 va a continuar y es probable que los mercados financieros de EE.UU. no toquen fondo hasta bien entrados en abril, dijo el CEO de DoubleLine Capital, Jeffrey Gundlach, en un webcast destinado a abordar los efectos económicos de la pandemia de coronavirus.
Durante la transmisión llamada «Tale of Two Sinks», una referencia a la crisis financiera de 2008 y la actual, así como al enfoque de «kitchen sink» al estímulo adoptado por los responsables de la política fiscal y la Fed, Gundlach dijo que la economía y los mercados financieros nunca serán los mismos, y que lo peor está por venir.
El llamado «nuevo rey de los bonos» cree que las ventas relacionadas con el coronavirus aún no han terminado y que el mercado alcanzará un fondo más «duradero» después de eliminar el mínimo de marzo. «Creo que volveremos a tener algo parecido a esa sensación de pánico nuevamente durante el mes de abril», mencionó.
También dijo que el mercado estaba actuando «algo disfuncionalmente» y que las proyecciones de los bancos de una recuperación económica de Estados Unidos «en forma de V» eran muy optimistas. En cambio, dijo que las caídas del mercado de este año podrían parecerse a las de la caída del mercado de valores de 1929, donde los mercados financieros mantuvieron sus niveles bajos durante casi un año antes de empeorar nuevamente.
«No creo que vuelva a estar donde estaba en enero durante mucho tiempo, particularmente en una base real», dijo.
Gundlach argumentó que los mercados financieros se están comportando de manera disfuncional, en parte debido al efecto continuo de los paquetes de estímulo monetario y fiscal.
«El estímulo monetario de la Reserva Federal crea «ganadores y perdedores» en los mercados de renta fija, que no funcionan como un refugio seguro en el entorno actual, sino que crean disparidades irracionales en el rendimiento entre diferentes clases de activos y, en algún momento, otro «sink» será necesario restaurar cierta racionalidad en los mercados», dijo Gundlach.
Sin embargo, el especialista cree que «la economía de los EE.UU. podrá estar realmente en un «mejor lugar», ya que la recuperación probablemente se centrará en una economía más resistente con más fabricación y autosuficiencia en los EE.UU. y menos énfasis en el consumidor estadounidense».
«El mayor ganador de todo esto puede ser la economía estadounidense una vez que pasemos un momento difícil», recalcó Gundlach, mencionando también que el estímulo monetario de la Fed ya ha eclipsado todas sus políticas de tasa de interés acomodaticia y flexibilización cuantitativa utilizadas durante la crisis financiera global 2008-2009 y la «Gran Recesión», mientras que el estímulo fiscal del Congreso de 2.200 billones de dólares (trillion en inglés) tampoco tiene precedentes.