A punto de cumplir un año del confinamiento que ha cambiado el mundo, los expertos se mantienen positivos y la mayoría augura una fuerte recuperación de la economía a partir de la segunda mitad del año. Una visión que comparten los principales directivos de Mercer responsables de las estrategias de inversión en España: “El año 2021 debería servir para que Europa y Estados Unidos vuelvan a tomar suelo y recuperen niveles similares a los que se encontraban cuando el virus inició su expansión”. Los expertos esperan que en conjunto las economías desarrolladas vuelvan a los niveles de pre-COVID a finales de 2021, con China y Estados Unidos a la cabeza, alcanzando los niveles de finales de 2019.
“Es probable que los gobiernos continúen con sus medidas de apoyo, ayudando tanto a los consumidores como a las empresas. Se espera que los bancos centrales estimulen con distintas medidas, apuntalando la actividad económica a través de condiciones financieras muy laxas”, explica Aleix Olegario, director de inversiones de Mercer. “Aunque la reciente ola de nuevos casos de COVID-19 ralentizará la actividad en algunas economías a corto plazo, la esperada vacuna debería conducir a una continua recuperación de la actividad y sobre todo en los sectores más afectados durante la crisis, como la movilidad y el turismo”, agrega Olegario.
Desde Pimco también esperan que en 2021 la economía mundial continúe con su transición de la infección a la recuperación y que recorra el largo ascenso de vuelta a su tendencia de crecimiento previa a la crisis, sobre todo durante la segunda mitad del año.
Los expertos de MCH Investment Strategies se suman a las valoraciones positivas y destacan que el escenario macro más probable para la economía global durante los próximos 12-18 meses es esperanzador. “Durante la segunda mitad de este año, EE. UU. y Europa probablemente entren en una fase de fuerte recuperación económica que hará que se puedan alcanzar los niveles de PIB pre-COVID a finales del ejercicio o a mediados de 2022”, prevén.
Desde Pictet AM también se muestran confiados con la economía global y esperan un crecimiento del PIB mundial del 6,1%, ligeramente por encima del consenso, con cifras similares en las principales regiones, a excepción de Reino Unido, que puede comportarse “significativamente peor”, según advierte Luca Paolini, estratega jefe de Pictet AM. Esto supone una mejora en sus previsiones para EE. UU., zona euro y emergentes.
Sin embargo, según explican los expertos del Consejo General de Economistas (CGE), la realidad es que la incertidumbre por los rebrotes del virus hace que la actividad siga limitada y que, posiblemente, el distanciamiento social y el cierre parcial de fronteras se mantengan a lo largo del primer semestre de 2021, haciendo peligrar la recuperación tanto de la demanda interna como de la externa. En este sentido, estiman que en 2021 el déficit público se sitúe en torno al 9,4% y la deuda pública en el 121%. Además, prevén un crecimiento de la economía española del 5,5% en 2021 (habiéndose desplomado un 11% en 2020) y del 4,8% en 2022.
Riesgos que vigilar que invitan a ser cautos y pacientes
No obstante, según advierten desde Pimco, aunque los mercados de riesgo podrían seguir comportándose bien a corto plazo gracias al impacto dual de los estímulos políticos y las campañas de vacunación masiva, gran parte de estos avances ya están descontados y, en el camino hacia la plena recuperación, los inversores deber tener cuidado con ciertos obstáculos que exigen construir cuidadosamente la cartera para superar con éxito cualquier nuevo episodio de volatilidad en los mercados financieros.
La fatiga fiscal en algunas economías avanzadas es uno de esos riesgos que mencionan. Otro es el paso de una situación de expansión del crédito a otra de contracción del crédito que probablemente se dará en China a lo largo de este año. “Además, las secuelas económicas podrían impedir que volvamos a los niveles de actividad previos a la pandemia y hacer que la recuperación sea irregular y desigual en los distintos países y sectores”, advierten los expertos de la entidad.
“Como subrayan estos factores de riesgo, opinamos que ahora es el momento de posicionar la cartera con cuidado y no de mostrarse excesivamente optimistas ni de asumir grandes riesgos. Teniendo en cuenta los bajos tipos, los estrechos diferenciales y la escasa volatilidad, planeamos poner el énfasis en la preservación de capital y en una cuidadosa gestión de la liquidez”, señalan.
“Intentaremos ser pacientes y flexibles, protegernos frente a un aumento de la volatilidad del mercado y añadir alfa en condiciones de mercado más complicadas. La fatiga fiscal podría hacer que la recuperación sea más débil, compensando otros riesgos para el nivel general de los rendimientos mundiales. El riesgo de secuelas económicas enfatiza la idea de que, aunque existen buenas oportunidades en los sectores relacionados con el ocio y los viajes, es necesario gestionar cuidadosamente las exposiciones y no dedicarse a comprar sin ton ni son los títulos más baratos”, añaden los expertos de Pimco.
Desde MCH IS identifican un triple reto al que los inversores tendrán que enfrentarse en los próximos 12-18 meses. «Primero, dadas las elevadas valoraciones en los mercados financieros, no parece el momento ya de aumentar de forma agresiva los niveles de riesgo en cartera; segundo: hay que buscar la forma de beneficiarse de forma tranquila de lo que puede ser un proceso significativo de rotación cíclica en renta variable; tercero: los bonos de gobierno a largo plazo son hoy un activo a evitar porque no ofrecen rentabilidad (ni siquiera nominal) y porque nos podrían dar grandes disgustos en un eventual entorno de apuntamiento de las curvas de tipos», explican.
Por su parte, los expertos de Esade consideran que la gestión de la vacuna, la administración de los fondos europeos, la transición de los ERTEs y las dificultades financieras de las empresas, serán los principales retos para la recuperación de la economía española en 2021.
Evolución favorable de la renta variable y la ISR
Por su lado, la Caja de Ingenieros destaca la evolución de los mercados de renta variable “El inicio de la vacunación es un factor de esperanza puesto que la reducción del riesgo sanitario favorecerá una normalización de la actividad económica que, además, se verá apoyada por los estímulos monetarios y fiscales. Según Xavier Fàbregas, director de Caja Ingenieros Gestión: “Europa ha sido una de las más afectadas por el coronavirus debido a su estructura productiva, por lo que la reactivación macroeconómica propulsada por el descubrimiento de las vacunas impulsará aquellos sectores de perfil cíclico-industrial (automoción, construcción, turismo, etc.)”.
Asimismo, la entidad destaca el “relevante” papel de la Inversión Socialmente Responsable (ISR). “Las empresas con sólidas políticas en cuestiones sociales, ambientales y de gobierno corporativo (ASG) están atrayendo el interés de muchos inversores”, admiten.