El año 2013 nos ha dejado un resultado más que positivo en los mercados financieros, con las bolsas más importantes del planeta en máximos históricos y los intereses de la deuda emitida por los estados en problemas en tendencia bajista. El comienzo de 2014 tampoco ha dejado a nadie indiferente: el Ibex 35, que era el alumno atrasado del grupo de grandes economías europeas, está repuntando más allá de los 10.400 puntos y ya se pueden oír voces sobre si superará o no los 12.000, “razón por la que consideramos que aunque estemos alcistas en bolsas, es importante no dejarse llevar por la ilusión de control”.
En un reciente informe, Ignacio Peralta Valdivieso, desde el Departamento de Análisis Macroeconómico de Aspain 11 Asesores Financieros EAFI, analiza otros indicadores que puedan alertar de un techo de mercado. “Aunque no estamos en un punto similar a mayo de 2006, fecha en la que se invirtió la curva de tipos de interés con pérdida de tendencia alcista tras perforar el nivel del 2000 el Nasdaq Composite, tenemos claro que el mayor enemigo del inversor en bolsa es uno mismo, porque se deja llevar por la psicología cognitiva, en donde cree que controla todas las variables. Ése es el principalenemigo del inversor, pensar que lo controla todo”, explica.
En esta ocasión, la EAFI considera que las bolsas aguantáran porque la renta fija no es alternativa de inversión, pero analizan la situación para estar preparados cuando llegue el momento de salir. Entre las variables que destaca la EAFI, están los tipos de interés a la baja de los bancos centrales, que “mantienen el dinero barato». También hay apetito por deuda periférica, lo que da una sensación de euforia a los inversores que les hace recordar a años atrás «en los que no había miedo al mañana y una vorágine de inversores acudía a los mercados para comprar cualquier cosa que alguien estuviera dispuesta a vender”. Por eso, creen que estamos en un momento en el que habría que reflexionar y pararse a pensar sobre lo que está aconteciendo y cómo puede resultar esta situación “que nos es extrañamente familiar”.
¿Corrección a la vista?
Desde el inicio de la Gran Recesión los bancos centrales se han ocupado de resolver los problemas que una serie de individuos han causado por sus excesos; “como todos sabemos el problema no era más que uno: tras años de burbuja inmobiliaria no había dinero, no existía un dinero con el que se contó y el precio de los bienes raíces empezó a caer en picado. La solución de los bancos centrales pasó fundamentalmente por inyectar grandes cantidades de liquidez al sistema”. El experto explica cómo a finales del año pasado la Fed decidió retirar paulatinamente los estímulos que había adoptado, pasando de compras de deuda por valor de 85.000 millones de dólares a 75.000 millones. Dicha decisión fue adoptada con positivismo por parte del mercado, que ve cerca el fin de la recesión.
Con el ejemplo del pasado, advierte de que ha habido otras recesiones con su correspondiente expansión posterior, y en el 80% de los casos las subidas de las bolsas han venido acompañadas con una disminución de los tipos de interés exigidos por la deuda y la inflación. Y no es el caso actual.
En cuanto a España, “está disfrutando de un momento dulce”, dice. “Un hecho significativo de esta extraña sitiación es el interés exigido por la deuda a 10 años de Irlanda, en un 3,5%, mientras que EEUU emite a un 3%. Hay una gran diferencia de rating crediticio, por lo tanto, el riesgo asumido por gran parte de los inversores vuelve a ser demasiado alto”. El experto dice que los bancos centrales son los últimos responsables en todo este asunto y mientras se producen las reformas que nos llevarán de nuevo a la senda del crecimiento en la economía real, «no debemos perder de vista lo acontecido recientemente y caer en errores del pasado».
Desde luego las bolsas se adelantan al ciclo en muchos casos, así que no sería de extrañar que el crecimiento de las economías sea un hecho en 2014. De no hacerse las cosas como se debe, podríamos enfrentarnos a un período de crecimiento del PIB en España y otro periféricos. Y además, continuar con la unión bancaria y fiscal y en EEUU decidir sobre el techo de deuda para evitar tensiones en los mercados.
Con EEUU, advierte sobre la carestía del mercado: “Las empresas cotizadas en Estados Unidos están a niveles de PER muy superiores a la media de las últimas expansiones, cotizando por encima de 15 veces beneficio, frente al rango de 10 a 15 veces beneficios como máximo que han llegado a cotizar en fases expansivas. Cabe destacar que estos niveles de sobreprecio se acercan a los que había antes de la Gran Depresión o antes de estallar la burbuja de las punto com. Actualmenteestamos en situaciones diferentes, así que no hablamos de que se cierna una caída en picado de los mercados, pero sí una corrección”.
High yield para corregir la volatilidad
En espera de una próxima corrección, la EAFI cree que una opción para reducir la volatilidad y conseguir rentabilidad en la renta fija es elegir fondos de alto rendimiento y con duraciones cortas, como el Robeco High Yield o el Janus High Yield.
Otra opción es la categoría de long-short, los cuales poseen la flexibilidad apropiada para este tipo de mercados, pudiendo obtener retornos sostenidos en el tiempo, y una capacidad de adaptación apropiada en sus estrategias. Fondos como el Absolute ReturnEurope-US1 de Alken, o el Total Return-Corto Europe-P EUR de Pictet, ambos fondos con un gran inicio de 2014, recomienda.
La elección de invertir en pares de divisas es algo a lo que debería atendercualquier inversor que desee aportar alpha a su cartera, dicen también en la entidad. “En lo referente al corto plazo, podemos esperar que el cruce EUR/USD siga con la tendencia alcista que comenzó en julio de 2013, aunque de confirmarse con fuerza una ruptura, esta tendencia podría dar lugar a un nuevo impulso bajista, debido principalmente por el recorte de los estímulos por parte de la Reserva Federal.
“Como conclusión, diremos que más allá de las tendencias y rupturas de resistencias importantes, no podemos olvidar la situación real en la que estamos, de momento todo parece tener un comportamiento positivo aunque ahora más que nunca debemos vigilar bien las señales de vuelta de tendencia para hacer los cambios necesarios en las estrategias de inversión (esperamos una corrección para disminuir el riesgo en las carteras y entrar más baratos)”, concluye.