Al contrastar el performance de las utilities españolas, Sonia Ruiz de Garibay, analista de Mirabaud Equity Research España, concluye que, tras alcanzar en 2022 varias compañías su nivel máximo de beneficios gracias a diversas razones (elevados precios, mejora de los márgenes y despliegue progresivo de las energías renovables), el sector español de utilities se sitúa en 2023, de acuerdo con el consenso, entre los que registran las mayores expectativas de crecimiento del BPA dentro de la Unión Europea.
Estas expectativas positivas de beneficios contrastan con un performance relativo prácticamente plano en 2022 y negativo en 2023, concretamente con un diferencial superior a 150 puntos básicos por debajo del Stoxx 600. Ello ha llevado al sector a registrar un de-rating en sus múltiplos cotizando a 12,4 veces el PER frente a la media histórica de 14 veces, lo que implica oportunidades de inversión atractivas.
Como explica Garibay, «el sector utilities está registrando un fuerte impulso en sus beneficios. El consenso estima un crecimiento en los mismos para 2023 mucho mayor que el del mercado en general, y sostenido también hasta el año 2024. Dicha postura se ve respaldada por factores que están mostrando una evolución positiva para las distintas actividades que comprende el sector”.
Entre estas actividades, Ruiz de Garibay destaca algunas: en primer lugar, la recuperación de los volúmenes hidráulicos y normalización de los factores de carga de los activos eólicos. El año 2022 ha sido uno de los más secos de la historia reciente.
Por otro lado, la comercialización tiene una mejora en los márgenes de suministro al producirse las renovaciones de contratos en un nuevo escenario de precios: desde la horquilla de 40-45 EUR/MWh hacia los clawbacks a 67 EUR/MWh. Además, los contratos PPA se están cerrando a precios más altos.
Los renovables tienen una aceleración en sus planes de desarrollo gracias a la reciente obtención de permisos medioambientales favorables y a la simplificación de los procedimientos administrativos para proyectos de pequeño tamaño.
Sobre las redes, comenta una mayor conciencia de la necesidad de desplegar más capex en la expansión y en la fiabilidad y digitalización de las redes.
Las utilities se convierten en piedra angular de la economía
Las empresas de servicios ligados a la energía se están convirtiendo en parte esencial de una de las tendencias más potentes y extendidas por todo el mundo: la de descarbonizar la economía. Esto implica un cambio estructural en la demanda de electricidad para las próximas décadas, explica la analista.
Tanto la tendencia a la descarbonización como su consecuencia directa, la mayor electrificación de la economía, representan importantes vientos de cola para este sector; y en especial para los subsegmentos de renovables y redes. La economía mundial es cada vez más consciente de la necesidad de nuevas inversiones en el desarrollo de activos renovables y de la extensión y el refuerzo de las redes para integrar esa nueva capacidad en los sistemas.
“Dentro de los distintos subsectores del mercado energético/eléctrico, en Mirabaud seguimos más centrados en las redes y en los valores renovables que en las compañías verticalmente integradas”, explica Ruiz de Garibay.
Algunos ejemplos de compañías analizadas son Redeia, Solaria, EDP Renovables, Endesa y Acciona.
Redeia es una empresa española gestora de la red troncal de transporte eléctrico que está experimentando inversiones crecientes y con una diversificación de negocio hacia satélites y fibra óptica. Solaria es un operador de energía solar renovable, principalmente nacional, y especialmente centrado en activos de gran tamaño. La compañía ha conseguido recientemente diversos permisos medioambientales favorables. EDP Renovables es una empresa puramente renovable de ámbito internacional en fase intensiva de aumento de capacidad en distintos mercados. Endesa es una empresa representante doméstica verticalmente integrada operando tanto en negocios regulados (redes) como liberalizados (generación y comercialización). Acciona es una empresa que cuenta con dos pilares de negocio: energía a través de Acciona Energía (filial que controla al 82,7%) e infraestructuras.
“Las utilities están siendo un sector generador de caja, lo que explica que, a pesar de una política monetaria expansiva y de una tendencia a preservar el balance, el sector siga aumentando inversiones y distribuyendo dividendos a sus accionistas”, concluye Sonia Ruiz de Garibay.