Según el Informe de Dividendos 2021, elaborado por Allianz Global Investors, este año volverán los dividendos. Después de haber caído algo menos de 290.000 millones de euros en 2020, comparado con los 360.000 millones de euros del año anterior debido a la crisis del coronavirus, es probable que el reparto de dividendos aumente nuevamente en 2021 hasta alcanzar aproximadamente los 330.000 millones de euros, según el documento.
Aunque los pagos de un año generalmente provienen de las ganancias del año anterior, muchas compañías recortaron o incluso suspendieron sus dividendos en 2020 como medida de precaución. En algunos casos, a las empresas no se les permitió distribuirlos porque habían recibido ayudas del estado debido a la crisis desatada por la pandemia. Según las conclusiones del informe, en general, poco menos de tres de cada cuatro empresas europeas pagaron dividendos el año pasado, sin embargo, más del 90% lo hicieron en años anteriores. Por lo que se espera que en 2021 aumente nuevamente el reparto de dividendos de las empresas del MSCI Europe.
“Al igual que en el panorama económico, no esperamos una recuperación en forma de V para la distribución de dividendos de 2021”, explica Jörg de Vries-Hippen, CIO de renta variable Europea de Allianz Global Investors. Es probable que a la disminución de aproximadamente el 20% en 2020 le siga un aumento de alrededor del 15% este año, de alrededor de 290.000 a 330.000 millones de euros.
“No esperamos que se alcance el nivel previo a la crisis del coronavirus antes de 2022, como muy pronto. Hay claras diferencias entre los sectores. Por ejemplo, el sector de la salud y el de los servicios públicos pudieron aumentar sus pagos durante la crisis y, en nuestra opinión, seguramente continúen este camino en el futuro. Otros sectores, por otro lado, tuvieron más problemas en 2020. Por ejemplo, es probable que las empresas de bienes de consumo y de bienes industriales puedan aumentar sus pagos de dividendos solo tras una recuperación económica general, y sectores como el de la energía y el de los servicios financieros posiblemente se mantengan por debajo de los máximos anteriores”, añade de Vries-Hippen.
A pesar de la caída, los dividendos en Europa continuaron contribuyendo sustancialmente a la rentabilidad de la renta variable en 2020. Como resultado de esta reducción, la rentabilidad por dividendo en Europa se redujo en aproximadamente un 1% en comparación con el año anterior, hasta aproximadamente un 2,75% en la segunda mitad del año pasado. Sin embargo, todavía está muy por encima de los rendimientos nominales de muchos valores del mercado de bonos. Los bonos alemanes a 10 años, por ejemplo, mostraron un rendimiento ligeramente negativo durante todo el año pasado.
La importancia de los dividendos se vuelve aún más clara a largo plazo. Según explica Hans-Jörg Naumer, director de análisis de mercados de capitales de Allianz Global Investors y autor del Estudio de Dividendos 2021, “los dividendos dan estabilidad a muchas carteras, especialmente en años con una evolución negativa de los precios, ya que pueden compensar esas pérdidas total o parcialmente. Además, debido a la política de dividendos de muchas empresas, las distribuciones fluctúan menos que los beneficios, lo que también estabiliza el rendimiento total de las acciones”. En Europa, la cultura de los dividendos es particularmente fuerte en comparación con Estados Unidos y Asia. Entre 1975 y finales de 2020, alrededor del 35% del rendimiento total de la renta variable es atribuible a los dividendos. “Para los inversores, por tanto, los dividendos siguen siendo de vital importancia”, añade Naumer, y asegura: “Con el coronavirus, la represión financiera ha entrado en la siguiente fase. Los tipos de interés negativos prevalecerán aún más tiempo. Por lo tanto, continúa la búsqueda de rentas de capital”.