MainStreet Partners, parte de Allfunds, y reconocido proveedor de datos ESG y de impacto, ha publicado su último análisis trimestral sobre el mercado de bonos verdes, sociales y sostenibles (bonos GSS, por sus siglas en inglés), revelando que el mercado ha superado ya los 5 billones de dólares en emisiones acumuladas.
El Informe de Tendencias del Mercado de bonos GSS del tercer trimestre de 2024 destaca la fortaleza del mercado en 2024, con los bonos verdes una vez más a la cabeza, representando el 57% de la emisión total de bonos GSS en lo que va de año. Solo en el primer semestre de 2024, según el informe, la emisión de bonos verdes alcanzó la cifra récord de 356.000 millones de dólares, lo que lo convierte en el periodo más activo desde la creación del mercado. Europa sigue dominando, con 291.000 millones de dólares en emisiones, lo que supone un aumento interanual del 13%.
El estudio también explora cómo el actual entorno normativo puede afectar al mercado de bonos GSS. En particular, las directrices de ESMA sobre el uso de terminología ASG o relacionada con la sostenibilidad en los nombres de los fondos obligarán a los gestores de fondos a alinear sus carteras con las exclusiones de los benchmarks alineados al Acuerdo de París o del de Transición Climática. Además, también revela que hasta 122 fondos de bonos GSS se enfrentan al dilema de o cumplir con los requisitos del benchmark, ajustando el posicionamiento de su cartera, o enfrentarse a un posible cambio de nombre. La mayoría de estos fondos están alineados con los objetivos de sostenibilidad, pero es posible que tengan que cumplir los nuevos criterios de los benchmarks.
A la luz de estos datos, Jaime Díaz-Río Varez, investigador asociado de MainStreet Partners, explica que estos datos ponen de relieve el crecimiento orgánico y robusto del mercado de bonos GSS. «La emisión récord de este año subraya el papel fundamental que desempeñan éstos en la financiación de la transición hacia una economía más ecológica y sostenible. Para que este crecimiento mantenga su impulso, es vital que los reguladores continúen en su misión de crear un entorno de transparencia para los inversores, pero también es igualmente importante crear un entorno de apoyo para los emisores en transición”, afirma Díaz-Río Varez.
El estudio destaca también otras conclusiones relevantes, como son los bonos vinculados a la sostenibilidad (SLBs por sus siglas en inglés) muestran mejoras estructurales puesto que los emisores de SLBs que se centran en las emisiones de CO2 cubren ahora una media del 70% de sus emisiones totales de gases de efecto invernadero con Objetivos de Desempeño de Sostenibilidad (SPTs por sus siglas en inglés), lo que supone un aumento significativo desde el 58% en 2023. «Esto indica un compromiso creciente de los emisores con planes de transición ambiciosos y transparentes», señala el informe.
Otra conclusión llamativa es que las utilities impulsan la transición ecológica, ya que este sector presenta la mayor ratio de deuda verde, con un 39% de su deuda total emitida en forma de bonos verdes, utilizando estos instrumentos para financiar proyectos de transición energética y, por último, la huella de carbono, el informe también hace hincapié en la importancia de la huella de carbono para los proyectos financiados por bonos verdes, señalando que este tipo de bonos siguen proporcionando una vía clara para los gestores de activos que aspiran a objetivos “Net Zero”.