La última reunión de los líderes de la Unión Europea escribió el siguiente capítulo sobre el Brexit. Tras una semana en la que la primera ministra británica, Theresa May, superó el desafío que ha cuestionado su liderazgo, la pelota vuelve a estar en el tejado del Reino Unido. Mientras, la situación para los mercados no cambia.
Mientras se van escribiendo los siguientes capítulos de sobre el Brexit, la volatilidad seguirá presente en los mercados, una volatilidad que, por ahora, es capaz de manejar. “La preocupación que genera el Brexit y la dirección de la política europea podrían mermar la confianza y alimentar la incertidumbre sobre los mercados de Europa”, apuntan desde Allianz GI.
Según indica el último análisis elaborado por DWS, respecto a lo ocurrido el pasado 12 de diciembre: “Fue alto excepciones. Los mercados, sin embargo, trataron principalmente el día como un no-evento. La libra subió y bajó un poco, terminando el día aproximadamente donde había estado el martes por la tarde. Y en términos de reacciones del mercado, eso fue todo. Lo que es bastante comprensible, si se piensa en lo que realmente sucedió y lo que podría significar.
En todo este entorno, las bolsas no parecen tener realmente en cuenta la posibilidad de abandonar el Brexit. “Aunque la prima de impago está aumentando, sigue siendo baja, situándose en 35 puntos básicos, lo que corresponde a una probabilidad de impago de apenas el 3%. En comparación, la prima en Italia es de 250 puntos básicos, lo que significa una probabilidad de impago del 20%. En cambio, el mercado parece estar más preocupado por la tendencia de la inflación a largo plazo. El diferencial de rendimiento entre la actual deuda pública británica a 30 y 10 años ha aumentado significativamente después de que Theresa May regresara a Westminster con el acuerdo. Parece que prácticamente nadie cree que el acuerdo cuente con la aprobación del Parlamento”, afirma Guido Barthels, gestor de Ethenea.
En opinión de Jérôme van der Bruggen, responsable de inversiones en Bank Degroof Petercam, “aunque Theresa May logró superar la moción de censura, la situación sigue siendo confusa: May se ha visto debilitada por este episodio y el parlamento del Reino Unido todavía no está dispuesto a votar a favor del acuerdo de retirada alcanzado el 25 de noviembre entre el Reino Unido y la Unión Europea. Ahora hay una multitud de escenarios y es probable que persista la incertidumbre”, apunta
Pero a finales de semana, May se topó con un nuevo muro, esta vez en Bruselas, durante la reunión de los líderes de la Unión Europa. “Estos decidieron dejar de lado los planes de formalización de la solución para la frontera irlandesa hasta que May aclare sobre lo que pretende con precisión. Las llamadas desde los laboristas para que el Gobierno no fuerce todavía la votación sobre la Ley de Retirada siguen produciéndose, especialmente ante la incapacidad de May de conseguir más concesiones por parte del mercado único”, explican desde Monex Europe.
En Bruselas, May ha intentado realizar avances concretos para presentar a su Parlamento, pero no ha encontrado el resultado esperado. Los líderes europeos han eliminado de nuevo “cualquier tipo de renegociación del acuerdo de retirada”, según explicó Donald Tusk, jefe del Consejo Europeo, e insistieron en que el principal problema está en Reino Unido, dado a la acogida tan hostil que ha tenido el acuerdo entre los diputados de todos los grupos.
Posibles escenarios
Mientras, los tres posibles escenarios siguen siendo los mismos: un Brexit con acuerdo, que finalmente no haya Brexit y que se produzca un Brexit sin acuerdo. Antes estos escenarios, Paul O’Connor, Director del equipo Multiactivos de Janus Henderson Investors, apunta que podrían ocurrir varias cosas: “May podría luchar por un Brexit suave, para superar las divisiones entre su propio partido. El partido Laborista podría proponer una moción de censura contra el gobierno actual, con el fin de dar el pistoletazo de salida a una elección general. Se pospone el Brexit. Si el parlamento británico permanece bloqueado, es posible que se exploren otras opciones, como la posibilidad de realizar un nuevo referéndum o alcanzar un Brexit sin acuerdo”.
Para Van der Bruggen, el siguiente paso al que podríamos es que el Reino Unido intente renegociar el acuerdo de retirada del 25 de noviembre para continuar su camino de salida de la Unión Europea con acuerdo. “Pero se está acabando el tiempo: se ha fijado un plazo, hasta el 21 de enero de 2019, fecha que ha sido fijada por la legislación y que compromete al país a tomar esta vía. A menos que haya un cambio político, la posición de Europa no variará fundamentalmente. Por lo tanto, es poco probable que se pueda negociar un acuerdo de retirada realmente diferente del acuerdo del 25 de noviembre”, añade.