La confianza de los inversores y ahorradores españoles en la evolución de las bolsas en los primeros meses de 2024 se mantiene firme en niveles positivos, aunque desciende ligeramente con respecto a la anterior lectura de septiembre de 2023.
Esta es una de las principales conclusiones del Índice de Confianza del inversor que elabora trimestralmente la gestora internacional JP Morgan Asset Management en España desde 2007, a partir de una encuesta a más de 1.300 personas (ahorradores e inversores particulares) con el objetivo de analizar el comportamiento y las motivaciones de los inversores y ahorradores españoles, así como su nivel de confianza en los mercados a corto y medio plazo (seis meses).
Tras una primera mitad de 2023 en la que los inversores recuperaron su visión optimista de la evolución de los mercados, que se había desvanecido por completo en 2022, dicha confianza se ha mantenido a lo largo de todo el año pasado, que cerró cuatro trimestres consecutivos en positivo, y muestra signos de continuidad en 2024.
El índice, resultado de la media ponderada de respuestas a la pregunta sobre la evolución de los mercados bursátiles en los próximos seis meses, continúa en niveles positivos (+1,05). Ello a pesar de los efectos del conflicto armado entre Israel y Hamás, que hundió la confianza en el mes de octubre, situándose temporalmente en negativo ( -0,7) por primera vez en el año. Pero, como se observa en el gráfico desglosado por meses, el rebote fue igualmente fuerte hasta alcanzar a cierre del año el 2,4. Un nivel de optimismo similar al experimentado a comienzos de 2003.
Razones para el optimismo
Los motivos para la confianza en los inversores más optimistas tienen que ver con una percepción de mejora de la situación económica y financiera, y una mayor estabilidad de los precios. Por el contrario, los inversores pesimistas se ven más influenciados por el posible efecto negativo en los mercados de los conflictos armados en Oriente Medio y Ucrania.
Mercados internacionales
Por áreas geográficas, no hay grandes diferencias entre la consideración del inversor español sobre unos mercados u otros. En este sentido, destaca lo repartido de las expectativas de los encuestados. Tres cuartas partes reparten su confianza entre el mercado nacional, el europeo y el americano. Así, un 24% confía más en la evolución positiva de los mercados español y europeo, mientras que la confianza en las bolsas estadounidenses sube cuatro décimas y es el preferido para el 23%. El mercado asiático resiste en niveles similares a los del trimestre anterior (17,2%) tras la fuerte subida a comienzo de año en las preferencias de los inversores por esta área geográfica.
Intención futura de inversión
En este contexto de moderado optimismo, resulta interesante observar la intención futura de inversión declarada por los encuestados. Así, en esta última lectura del índice desciende el número de ahorradores que dicen que no invertirán en productos financieros en los próximos meses (dos de cada diez encuestados). Y se mantiene en torno al 40% los que apostarán por depósitos y cuentas corrientes. En cambio, aumenta la intención de inversión en productos tanto en renta variable como fija.
Por su parte, aumenta dos puntos la intención de inversión en fondos de inversión (+3,4 puntos porcentuales), opción elegida por un 15,4% de los consultados, y en acciones (+0,5), preferidas por el 11,2%. Y destaca, un trimestre más, la estabilidad en la preferencia por la renta fija, letras del Tesoro y bonos que aumenta ocho décimas y llega al 11%, cuando hace un año era la opción de solo el 5,7% de ahorradores.