El 78% de los inversores mundiales con grandes patrimonios (HNW, por sus siglas en inglés) poseen una elevada posición en efectivo, según una encuesta realizada por Capital Group. Reservados a la hora de invertir, el 48% de estos inversores considera que la renta fija es tan arriesgada como la renta variable. Según revela la encuesta, entre los motivos de preocupación que citan de cara a los próximos 12 meses figuran el temor a una mayor volatilidad (60%), una inflación más rápida (56%) y subidas de tipos (41%).
«Es fácil estar refugiado en la liquidez, pero creemos que quizá el mayor error de mercado en la actualidad sea mantener un exceso de efectivo. Históricamente, los tipos de interés del efectivo decaen rápidamente una vez que los bancos centrales alcanzan su nivel máximo, por lo que, para los inversores de alto patrimonio neto, tener demasiado efectivo en cartera podría obstaculizar la generación de riqueza a largo plazo», comenta Alexandra Haggard, responsable de servicios de clases de activos para Europa y Asia de Capital Group.
Según Haggard, “la historia ha demostrado que la renta fija y la renta variable superaron al efectivo cuando la Reserva Federal terminó de subir los tipos. Desde una perspectiva a largo plazo, creemos que ahora es el momento de abandonar el efectivo”.
Una conclusión llamativa de la encuesta es que la geopolítica se considera un riesgo importante, que hace que el 55% de los inversores se muestren cada vez más inseguros sobre dónde invertir, pero existe optimismo a más largo plazo. En concreto, el 63% tiene previsto invertir más en renta variable en los próximos 12 meses, y un tercio cita la buena relación calidad-precio como motivo del aumento.
Además, el 49% de los inversores se plantea aumentar sus asignaciones a la renta fija, en el plazo de un año, con una preferencia por la renta fija de mayor calidad, mientras que el 90% se inclina por la deuda pública, el 85% por los bonos de alto rendimiento y el 84% por los bonos corporativos con grado de inversión.
Por último, las conclusiones de la encuesta muestran que el 58% de los inversores HNW espera que la renta fija y la renta variable tengan menos riesgo que el efectivo, ya que pueden batir a la inflación en los próximos diez años.
“A pesar de la incertidumbre macroeconómica, este entorno todavía presenta oportunidades para los inversores a largo plazo centrados en los fundamentales. Los bonos desempeñan un papel central en una cartera bien diversificada y el expansivo mercado mundial de renta fija presenta abundantes fuentes de rendimiento, factores de riesgo y rentabilidades. El retorno de los ingresos a la renta fija significa que los inversores pueden beneficiarse poniendo efectivo a trabajar en bonos de alta calidad con un rendimiento atractivo para potenciales ingresos futuros”, añade Scott Steele, responsable de Renta Fija, Europa y Asia de Capital Group.