La economía española crecerá a buen ritmo este año, pero no hay que perder de vista incertidumbres como el Brexit, que ya es una realidad, y las elecciones en EE.UU., sin olvidar los efectos de la epidemia del coronavirus que llega en un momento inoportuno para China, con una bajada ininterrumpida del crecimiento desde 2007. De acuerdo con las previsiones del Observatorio Financiero recogidas en el “Informe enero 2020”, elaborado por la comisión financiera del Consejo General de Economistas de España.
“La economía española está creciendo por encima de los países de nuestro entorno y el paro se ha reducido considerablemente, a pesar de que aún continúa siendo muy alto; pero hay que tener en cuenta que tenemos algunos retos ineludibles para este año, entre los que habría que destacar la transición ecológica, la integración social y la transformación digital, que deberíamos afrontar desde el liderazgo de manera perentoria”, subrayó Valentín Pich, presidente del Consejo General de Economistas de España, en la presentación de su informe. Además, Pich ha resaltado el crecimiento del PIB, que ha alcanzado el 2%.
No obstante, pese al buen ritmo de crecimiento de la economía española, aún quedan retos en el horizonte. Antonio Pedraza, presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas, destaca el Brexit, las elecciones estadounidenses o los posibles efectos del coronavirus que están ocurriendo en un “momento inoportuno para China, dado que su crecimiento viene cayendo año tras año desde 2007, en que lo hacía al 14,2%, mientras que para este 2020 las previsiones eran del 6%”. Además, a nivel interno, Pedraza destaca que “están pendientes de la aprobación de los nuevos presupuestos, el control de la deuda y del déficit, el problema sin resolver de las pensiones y la alta tasa de paro –a pesar de su bajada–, factores estos que pueden ralentizar nuestro crecimiento”.
Este crecimiento del año 2019 podría actuar, según los expertos, como un elemento de tracción positiva para los primeros meses de 2020 y podría hacer de inercia para el resto del año y conseguir un crecimiento aceptable a final de este, manteniendo el diferencial con Europa. “Se prevé un crecimiento del orden del 1,6% para este año en base a la demanda interna favorecida por el mantenimiento de unas condiciones financieras holgadas”, asegura Salustiano Velo, coordinador del Observatorio Financiero.
Indicadores económicos y posición exterior: continúan las políticas expansivas
El año 2019 se ha caracterizado por un debilitamiento de la trayectoria expansiva de la economía mundial, como consecuencia principalmente de las tensiones comerciales internacionales. El crecimiento mundial ha sido inferior al 3%, según los datos del Observatorio Financiero. Además, la economía de la zona euro creció un 1,2%, el ritmo más pequeño desde 2014 y un descenso de siete décimas respecto a 2018.
Como consecuencia de esta ralentización, los bancos centrales continúan con las medidas de política monetaria expansiva, con el fin de asegurar unas condiciones de financiación favorables que respalden el gasto en consumo y la inversión empresarial. Desde el informe advierten de que las restricciones comerciales o el abandono del multilateralismo pueden causar un efecto negativo en el crecimiento a nivel mundial.
En España, el PIB, apoyado por la demanda nacional ha crecido un 2% este año, menos que en 2018 pero “superior al crecimiento de las economías de nuestro entorno”, destacan desde el Observatorio. Asimismo, en el cuarto trimestre, el consumo privado se ha moderado ligeramente dos décimas, pasando del 1,4% al 1,2%. Además, la caída del 3,5% de la construcción ha supuesto un descenso de la inversión del 0,3%. “La creación de empleo se ha moderado”, recogen. Mientras que la población activa aumenta en torno al 1%, acercándose a los 20 millones, la tasa de paro se mantiene en el 13,8%.
De cara a 2020, el informe subraya que “teniendo en cuenta la desaceleración de la economía prevista para el primer semestre del 2020 y que la política monetaria del BCE de tipos de interés cero no ayudarán, se estima que el IPC no superará significativamente el 1%”. En lo referente a la previsión de paro para este año, desde el Observatorio creen que podría situarse en torno al 13,25%.
Tipos de interés en los mercados interbancarios y en los mercados de deuda: se reduce la prima de riesgo
Debido a la continuidad de las políticas expansivas de los bancos centrales, los tipos de interés tipos de interés siguen en un entorno de tipos negativos, para hacer frente a la ligera desaceleración económica internacional y a las bajas tasas de inflación.
Asimismo, el euríbor a un año cerró 2019 en -0,261% y continúa su descenso hasta el -0,284%. Al mismo tiempo, la prima de riesgo en España se ha reducido desde los 117 a finales de 2018, hasta los 67 puntos con los que cerró este 2019. Según el informe, se trata de una mejora extendida en la eurozona y que podemos ver en Portugal, Italia o Grecia.
En cuanto al indicador de estrés de los mercados financieros españoles, elaborado por la CNMV, este se sitúa en torno a 0,22, un bajo nivel de estrés según el Observatorio. A la misma conclusión se llega al analizar la evolución del precio de los Credit Default Swaps (CDs).
Indicadores de política monetaria y crédito: cae la tasa de crecimiento del agregado monetario
El informe destaca que la tasa de crecimiento del agregado monetario M3 ha disminuido en la zona euro hasta situarse en el 5% en diciembre desde el 5,6% registrado en noviembre. Al mismo tiempo, en España lo hacía al 4,3% en octubre. “Su principal contrapartida, la aportación del crédito al sector privado, ha tenido en diciembre una tasa de crecimiento de 3,7 puntos porcentuales en la zona euro, frente a los 3,5 puntos porcentuales en noviembre”, subrayan.
Además, España ha supuesto un 17,3% del balance del Eurosistema, que ha seguido aumentando en el año según los datos del Consejo General de Economistas. Asimismo, los fondos de inversión “han recuperado su vitalidad en el 2019, después de un mal ejercicio en el año anterior”, asegura el informe.
“La morosidad en los bancos cae hasta el 5,35%, mejorando un 1,04% en el año”, subrayan desde el Observatorio Financiero. S bien los depósitos se mantienen planos en su retribución, los créditos escasamente logran subirla un 0,1 p.p. en el año, bajando dentro de ellos 0,3 p.p los que se destinan al consumo (efecto competencia), por lo que continúa la dificultad para obtener márgenes, concluye el informe.