Durante el Brexit, la media de CTAs lo hizo muy bien: el índice SG Trend, un indicador de resultados de estas estrategias subió un 2,9% el 24 de junio, el día después del referéndum en Reino Unido. Este tipo de fondos superó tanto a la renta variable, donde el índice MSCI World cayó un 4,9%, como a los hedge funds en general, con el índice HFRX Global Hedge Fund perdiendo un 1,1%.
Guillaume Jamet, principal portfolio manager del programa Lyxor Epsilon, cree que esta evolución refleja la característica esencial de las estrategias de seguimiento de tendencias: la descorrelación.
El entorno de mercado ha sido mixto para estas estrategias durante el último trimestre, como lo demuestra el índice SG Trend que registró una caída del 1,2% en el segundo trimestre. Las estrategias de seguimiento de tendencias van bien en contextos en los que:
- Los mercados muestran tendencias claras
- Los retornos entre las distintas clases de activos están débilmente correlacionados, lo que permite reducir la volatilidad mediante la diversificación a través de múltiples clases de activos
La primera condición no se ha cumplido: el afán del mercado por las tendencias sigue siendo bajo, como indica el índice Lyxor Epsilon Trend –que usa distintos riesgos y variables para calcular la resistencia media de las tendencias en los mercados financieros de forma continua durante un año– que perdió un 4% a finales de junio, muy por debajo de la media histórica del 4%.
La segunda condición se ha cumplido parcialmente: las correlaciones de mercado se mantienen bajas. El índice Lyxor Epsilon Correlation –que utiliza varios indicadores de riesgo y retorno para estimar la correlación entre los mercados de forma continua durante un año– se mantuvo por debajo de su media histórica del 26%, con excepción de la semana siguiente al Brexit, cuando subió un 4% por encima de ella. «Claramente, el Brexit ha impactado en las estadísticas de correlación», dice Jamet. «Sin embargo, no hay hasta ahora ninguna indicación de que estamos entrando en un régimen de alta correlación sistemática como el que se dio de 2008 hasta 2012».
«En el actual entorno la gestión del riesgo es clave», dice Jamet. «Hace cuatro años hicimos una revisión a fondo del modelo subyacente del programa Epsilon. Introdujimos diversificación basándonos en los factores de riesgo implícitos, en lugar de sobre las clases de activos. Ahora vemos que esta innovación ha dado sus frutos. Nuestro rendimiento anual a 3 años ha sido bueno, mientras que la volatilidad se ha mantenido dentro de nuestro objetivo del 10%. Esto nos sitúa en el cuartil superior de nuestro grupo de pares».
Los últimos meses los expertos observaron varias tendencias claras del mercado, todas las cuales parecían anticipar un Brexit:
- La depreciación de la libra esterlina
- La apreciación del yen japonés, que normalmente sirve como valor refugio para los inversores asiáticos
- El repunte tanto en los gilts como en los bunds, como consecuencia de la huida hacia los activos de calidad y en previsión de las políticas monetarias aún más acomodaticias
«El programa Epsilon fue capaz de beneficiarse de todas estas tendencias. En los meses previos a la consulta, los mercados descontaban un Brexit. En contraste con muchos gestores discrecionales, las CTA no reaccionaron de forma exagerada a la reversión en el sentimiento del mercado que se produjo la semana antes de la votación real, y se aferró a sus posiciones largas. Esto revela las ventajas de una estrategia que analiza los mercados de otra manera», explica el experto de Lyxor AM.