Ahora que el mercado recupera la calma tras semanas de convulsiones por Grecia, los inversores están empezando a salir de la burbuja para replantearse sus decisiones de compra. En este contexto Fabio Riccelli, gestor del FF Iberia Fund, llama la atención sobre la renta variable ibérica, que ha quedado rezagada “injustificadamente” por el sentimiento negativo de la situación helena. Los datos económicos muestran los primeros efectos de las reformas, que se benefician además en aspectos coyunturales como la debilidad del euro y el precio del petróleo.
“Las economías ibéricas van por buen camino. Los datos económicos se están estabilizando y creando un círculo virtuoso en el que mejora la producción industrial, mejora el empleo y mejora la confianza del consumidor, lo que impulsa las ventas minoristas. Las reformas laborales han hecho que los costes laborales de España y Portugal sean más competitivos, lo que ha estimulado la inversión extranjera directa. La debilidad del euro y del precio del petróleo también serán factores beneficiosos y, por primera vez en 20 años, España también ha generado un superávit comercial. La recapitalización y la consolidación del sistema bancario prosiguen”, explica el gestor.
Por eso, cree, al margen de lo que suceda en los próximos días con Grecia, el programa de relajación cuantitativa del BCE, la recapitalización y las reformas que ya han llevado a cabo los bancos españoles y portugueses y el hecho de que ambos países estén encaminados a reducir la relación deuda pública-PIB durante los próximos 18 meses, limita el posible impacto de la crisis helena.
Lo positivo para España, coinciden los expertos, es que la resaca griega podría hacer a los votantes más cautos ante los partidos populistas como Podemos, algo a tener en cuenta de cara a las elecciones que se celebrarán a finales de año. Las encuestas recientes han puesto de manifiesto que Podemos está perdiendo apoyo y que los partidos tradicionales lo están recuperando.
“Las bolsas ibéricas han sido golpeadas por el sentimiento negativo procedente de Grecia y han quedado rezagadas con respecto al centro de Europa y no creo que esta situación esté justificada, a la vista de los cimientos más firmes de estas economías. A consecuencia de ello, las valoraciones de algunas empresas son atractivas y eso crea oportunidades”, afirma el portfolio manager de Fidelity.
Pero no todo lo que reluce es oro. Aunque es cierto que las acciones ibéricas están más baratas que antes, esta afirmación no es universal. De hecho, explica el experto de la firma, algunas de las posiciones clave del FF Iberia Fund “son ganadores a largo plazo que no se han visto penalizados tanto como el mercado, pero que están baratos cuando se tienen en cuenta la fortaleza y la vigencia de los modelos de negocio. Dentro de este grupo, citaría al grupo textil Inditex, al proveedor de software Amadeus y a la multinacional del sector sanitario Grifols”, apunta.
Hablando de los sectores españoles con mayor potencial, Riccelli cita la energía renovable y, en concreto, la energía eólica. Históricamente, el gran problema de la energía eólica ha sido su elevado coste, pero en mi opinión, el margen para seguir aumentando la eficiencia, mejorar los factores de carga y, al mismo tiempo, reducir los costes contribuirá a generalizar la energía eólica como fuente de suministro eléctrico durante la próxima década aproximadamente y creará excelentes oportunidades de inversión. El fondo tiene en cartera actualmente a Gamesa, EDPR e Iberdrola”, cuenta.
El sector bancario debería beneficiarse de la consolidación que se ha producido durante los últimos cinco años. En este caso, el fondo de Fidelity apuesta por entidades que están más expuestas a la recuperación que viven las pymes, que generalmente tienen mayores márgenes, y que presentan valoraciones atractivas en el negocio subyacente.
“Si la situación macroeconómica no repercute en las decisiones de inversión de las empresas, preveo que las economías ibéricas sigan mejorando. La región debería ponerse al nivel del resto de Europa en lo que a sentimiento inversor se refiere. Este cambio podría producirse hacia finales de año, después de las elecciones generales en España”, concluye.