El año 2020 ha sido volátil para el mercado de fusiones y adquisiciones. Un año en el que vimos una interrupción casi completa de la actividad durante los primeros meses de la crisis del COVID-19 y un repunte en la segunda mitad, cuando el valor de las operaciones aumentó en más del 30% en el tercer y cuarto trimestre.
La nueva encuesta de Bain & Company, realizada a casi 300 profesionales del sector de fusiones y adquisiciones, muestra que el apetito por nuevas operaciones sigue siendo sólido, y aproximadamente la mitad de los encuestados esperan una mayor actividad de fusiones y adquisiciones en sus industrias en 2021. El estudio también muestra que estas prácticas seguirán siendo un pilar estratégico clave para los negocios, y los profesionales esperan que las operaciones de M&A contribuyan al 45% de su crecimiento durante los próximos tres años, en comparación con aproximadamente el 30% de los últimos tres.
«El 2021 promete ser un año dinámico para las fusiones y adquisiciones. Los ejecutivos esperan un repunte en la actividad y afirman que serán aún más importantes para lograr el crecimiento. Para competir en este entorno cada vez más disruptivo, los profesionales del M&A deben reconsiderar su estrategia y hoja de ruta de fusiones y adquisiciones; ampliar sus opciones en este ámbito para incluir a las empresas de venture capital, asociaciones y participaciones minoritarias; y digitalizar aún más su proceso de M&A”, explica Cira Cuberes, socia de Bain & Company en Madrid.
Aumentan los múltiplos en las operaciones
Además de un repunte inesperado, 2020 trajo una serie de sorpresas para los profesionales en el ámbito de las fusiones y adquisiciones, entre ellas, las altas valoraciones de las operaciones en muchas industrias. Con la pandemia haciendo mella en la economía, era natural suponer que las valoraciones se debilitarían y provocarían fusiones y adquisiciones de empresas en dificultades.
Pero en el impredecible año 2020 sucedió lo contrario. Globalmente, el valor medio de los múltiplos de las compañías en relación con el EBIDTDA aumentó a 14 veces, respaldado por industrias de rápido crecimiento, como la tecnología, las telecomunicaciones, los medios digitales y los productos farmacéuticos.
Un estímulo gubernamental sin precedentes, combinado con la continuidad de los tipos de interés bajos, un aumento en las tasas de ahorro de los hogares, el récord en el capital disponible para la inversión (dry powder) de las empresas de Private Equity (PE) y los mercados de deuda accesibles, han contribuido a mantener los precios de los activos.
Una creciente urgencia por desinvertir
Mientras el COVID-19 supuso una demanda sin precedentes en la gestión del ancho de banda, la actividad de desinversión pasó a un segundo plano. El volumen de desinversiones disminuyó un 15% en 2020 y el valor se redujo un 21%. Sin embargo, la crisis ha añadido la urgencia de desinvertir, ya que las empresas necesitan desviar sus escasos recursos hacia las mejores oportunidades en medio de una creciente disrupción de la industria.
Aproximadamente el 40% de los profesionales encuestados por Bain & Company esperan un aumento en las desinversiones durante los próximos 12 meses, y las industrias más afectadas durante la pandemia, como el comercio minorista, la energía y la hostelería, probablemente experimentarán el nivel más alto de actividad de desinversión.
El informe de Bain & Company también muestra el aumento del apetito por parte de los compradores de activos desinvertidos. Alrededor del 62% de los profesionales de fusiones y adquisiciones encuestados esperan más interés en adquirir activos que se descarten en sus industrias durante los próximos 12 meses.
Mientras tanto, se espera que el interés del capital privado (PE) en estos activos se mantenga alto el próximo año, debido a la presión para continuar invirtiendo el capital disponible. En todas las industrias, el 30% de los encuestados anticipa que PE aumentará su interés en comprar activos desinvertidos, y el mayor aumento se espera en la fabricación avanzada.
Perspectivas por industria
Aún más que antes, el entorno externo en cada industria en particular está estableciendo los límites de cuánto pueden hacer las empresas de fusiones y adquisiciones. Las compañías en los sectores de la tecnología, los medios de comunicación y las telecomunicaciones experimentaron fuertes aumentos en su capitalización bursátil el año pasado, mientras que las de energía y servicios financieros experimentaron las mayores caídas.
Productos de consumo: sería natural culpar a la pandemia de la caída en las valoraciones de las operaciones en compañías de productos de consumo el año pasado, pero representa una continuación de las tendencias que se han estado desarrollando durante los últimos tres a cinco años.
El análisis de Bain & Company muestra que es posible que la industria experimente un repunte en las operaciones: el 45% de los profesionales de fusiones y adquisiciones de productos de consumo encuestados esperan que éstas aumenten durante los próximos 12 meses. El cambio más profundo en las fusiones y adquisiciones de productos de consumo se produce en el mix de las transacciones.
Las operaciones de adquisición con estrategia de diversificación y las de capacidades (scope and capability deals) ahora representan el 60% de las transacciones superiores a los mil millones de dólares. La actividad de las operaciones para las marcas insurgentes, aquellas que superan significativamente el crecimiento de su categoría mientras que mantienen una escala mínima, se ha duplicado o triplicado desde 2015.
Estas tendencias apuntan a un cambio más fundamental en la estrategia de fusiones y adquisiciones a medida que la industria de productos de consumo reacciona al bajo crecimiento y la disrupción histórica en las necesidades de los consumidores, los cambios en el canal y la competencia.
Comercio minorista (retail): la pandemia aceleró el cambio hacia el comercio electrónico e incrementó la importancia de las fusiones y adquisiciones en la industria minorista. Los profesionales de M&A de retail encuestados por Bain & Company esperan que las fusiones y adquisiciones contribuyan con casi un 60% al crecimiento de los ingresos brutos durante los próximos tres años en comparación con alrededor del 35% en los últimos tres, uno de los mayores saltos entre todas las industrias encuestadas. La actividad se intensificará tanto para operaciones de escala como las de adquisición con estrategia de diversificación.
Los mercados buscan escala, crecimiento y rendimiento digital. En ninguna parte se ve esto con mayor claridad como en el sector de la alimentación. Cada vez más, estas empresas están adoptando nuevos enfoques creativos para las ofertas. Algunos compran o se asocian para integrar cadenas de suministro, mientras que otros se asocian para acceder a nuevas capacidades y tecnología y para acelerar el crecimiento de nuevos canales.
Tecnología: las fusiones y adquisiciones en este sector se recuperaron desde casi un punto muerto en el segundo trimestre de 2020 para alcanzar una actividad récord en el volumen y en el valor de las operaciones en la segunda mitad del año.
Las fusiones y adquisiciones de tecnología continuaron su tendencia hacia más operaciones de adquisición con estrategia de diversificación, orientadas al crecimiento y la adquisición de nuevas capacidades, lo que representa el 81% de las operaciones de la industria en 2020, mucho más que otros sectores.
Lo más significativo es el creciente interés de los inversores no tecnológicos en este espacio, que ahora representan casi las tres cuartas partes de las operaciones en el sector tecnológico, frente al 60% de hace una década.
Medios de comunicación: se esperan una serie de nuevas operaciones durante los próximos dos o tres años, y la mayor parte del crecimiento en este sector provendrá del streaming de videos. El análisis de Bain & Company señala que solo habrá unos pocos ganadores una vez que se calmen las aguas en este momento de abordajes.
Los datos del informe muestran que el streaming creció rápidamente en la primera mitad de 2020, pero que la demanda de los consumidores se limita a tres o cuatro suscripciones. El informe también profundiza en los matices únicos de la integración de las empresas de medios, especialmente de manera virtual, dada la importancia del talento creativo en la industria.
Telecomunicaciones: tras una fuerte caída el año anterior, el valor de las operaciones del sector de las telecomunicaciones creció aproximadamente un 50% en 2020. La industria también fue testigo de un cambio en el mix de las ofertas. A pesar de los temores de que los reguladores anularan una mayor consolidación de la industria, las fusiones y adquisiciones de escala se recuperaron.
Mientras tanto, las fusiones y adquisiciones de infraestructuras, un tipo de operación que es exclusiva de las telecomunicaciones, continuaron a buen ritmo a medida que las empresas buscaban monetizar los activos de infraestructuras que tienen entre tres y cuatro veces los múltiplos de valoración de los propios operadores de telecomunicaciones integrados.
Banca: la industria de la banca está preparada para un repunte en la actividad de fusiones y adquisiciones. Las valoraciones están cayendo en este sector, y el precio medio respecto al valor en libros disminuyó un 35% globalmente en 2020.
Incluso después de una consolidación gradual, la banca sigue siendo una industria fragmentada en todos los mercados clave, y los cinco bancos principales representan solo el 30% del total de depósitos en Estados Unidos, 40% en Reino Unido y 38% en China. A diferencia de muchas otras industrias, los reguladores están creando condiciones y marcos que favorecen la consolidación. Por ejemplo, el Banco Central Europeo publicó recientemente directrices para la consolidación en el sector bancario.
En cuanto al impacto de la crisis sanitaria, a pesar de las intervenciones de los gobiernos, las consecuencias económicas han provocado que los bancos que entraron en la pandemia en una posición más débil que sus competidores se debiliten aún más, ampliando la brecha entre los bancos menos saludables y aquellos que se han mantenido relativamente sólidos a pesar de pérdidas sustanciales y ratios de capital más bajos.
La ruptura creará oportunidades para que los bancos más fuertes adquieran y para que los más débiles con brechas en su ratio de capital busquen en sus carteras potenciales empresas para desinvertir.
Seguros: las aseguradoras están racionalizando sus negocios para redefinirse con un enfoque más estrecho y un núcleo más sólido. La desinversión de negocios no esenciales representó alrededor del 70% de las operaciones del sector de seguros valoradas en más de mil millones de dólares durante los últimos cinco años.
Dado que aún existe una incertidumbre considerable sobre cómo madurarán las capacidades emergentes, muchas aseguradoras establecidas han optado por acceder a nuevas capacidades a través de inversiones y de asociaciones.
Si bien las inversiones en empresas de tecnología privadas por parte de las aseguradoras establecidas se desaceleraron en 2020 con respecto a su ritmo reciente, Bain & Company espera un repunte en 2021 a medida que las aseguradoras se preparan para el futuro. El continuo entusiasmo del mercado por las insurtechs sugiere que no hay escasez de ideas y de capacidades innovadoras que podrían beneficiar a las aseguradoras.