En un entorno de rentabilidades nulas o incluso negativas para gran parte de la deuda soberana europea, los bonos corporativos continúan ofreciendo unos retornos más atractivos. En vista del actual ritmo de actividad económica y previsión de más inflación, se espera una reacción al alza por parte de los tipos de interés de mercado. En este contexto, el fondo de renta fija de EDM, EDM Ahorro, ha incrementado sus posiciones en bonos corporativos a cupón flotante, con un peso que ahora se sitúa en un 37% de la cartera, mientras que un 13% está invertido en mercado monetario en formato pagaré.
Ante un entorno de mayor volatilidad también se ha reducido la exposición a bonos de elevado rendimiento hasta un 27% del fondo, incrementado el peso de bonos de grado de inversión.
De manera adicional, el fondo busca valor en nichos como bonos del mercado MARF o emergentes. “Estas categorías tienen menos ponderación en el fondo, pero nos permiten diversificar en distintos mercados y sectores, siempre tras un riguroso análisis del emisor”, comenta Karina Sirkia, gestora de renta fija de EDM. “Este año los bonos del mercado MARF en los que estamos invertidos han sido los que más han aportado al resultado del fondo”, sostiene Sirkia.
En relación al mercado de EE.UU., la gestora alude a su evolución, adelantada en el ciclo respecto a Europa, como potencial reflejo de lo que ocurrirá también en la eurozona. En este sentido, en línea con el camino de normalización iniciado por el BCE, es previsible que pronto se produzcan alzas de los tipos de interés de referencia y de la deuda soberana. En cambio, es de prever que, al igual que en EE.UU., el crédito corporativo soporte mejor las caídas del precio del bono soberano, gracias al cupón.
En este contexto, Sirkia apunta a la importancia de “ser muy selectivos y disciplinados en el análisis del crédito”, a la hora de invertir en bonos corporativos, “ya que de ello dependerá distinguir los buenos créditos de los malos, es decir, de las compañías que no puedan repagar cupones o principal”.
La estrategia aplicada hasta la fecha ha dado buenos resultados a EDM Ahorro, que nunca ha sufrido un default en su cartera.