DoubleLine Capital, la firma de renta fija co-fundada por el mediático Jeffrey Gundlach, ha vuelto a registrar un enero de ensueño al captar 3.000 millones de dólares en el mes. Tras batir en 2014 a todos sus competidores, DoubleLine comienza el año pisando fuerte y se anota el mayor número de suscripciones de su historia, según datos de Bloomberg. Acumula a 31 de enero alrededor de 64.000 millones de dólares de AUM.
No es un secreto que, ahora mismo, la gestora con sede en Los Ángeles es la principal beneficiada de la salida de capital que sufre PIMCO desde que su gestor estrella, Bill Gross, decidiera fichar por Janus Capital tras tres décadas manejando el fondo de renta fija más poderoso del mundo, el PIMCO Total Return.
Tras la salida de Gross, parece que los inversores han decidido dar una oportunidad a los managers del DoubleLine Total Return Bond Fund, la estrategia que vendría a ser equivalente del Total Return de PIMCO. No en vano, el pasado mes captó 2.600 millones de dólares en suscripciones netas, otro record para la gestora que lidera Gundlach, conocido en el mercado como “El Rey de la deuda”.
En su último informe de mercado, el analista Ryan Kimmel y el portfolio manager Samuel M. Garza, ambos de la estrategia DoubleLine Capital’s Multi‐Asset Growth, se plantean entre otras cosas si las rentabilidades de la deuda estadounidense se preparan para subir de cara a un endurecimiento de la política monetaria de la Fed.
Kimmel y Graza creen que muchos inversores están preocupados por que los tipos de interés suban pronunciadamente en 2015 si la Fed comienza a normalizar su política monetaria, ya que el mercado espera que lo haga enel segundo semestre del año. De hecho, recuerdan, la media de las previsiones realizadas por los economistas estiman que la rentabilidad de la deuda estadounidense a 10 años a finales de 2015 será de 2,78%, unos 100 puntos básicos por encima de los actuales niveles.
“Sin embargo, creemos que si la Reserva Federal no eleva los tipos este año, el mercado podría ver la acción como deflacionista y podría provocar que la Fed de marcha atrás tras un par de subidas, algo similar a lo que ocurrió con los ciclos prematuros de incrementos del BCE en 2011, el Royal Bank of Australia en el período 2009-2010, y el Banco de Suecia en 2010-2011”, explican.
Por el contrario, “si la Fed sube los tipos creemos que probablemente veremos que la curva de rentabilidad continúa aplanándose ya que el mercado descuenta que el organismo va a inducir una desaceleración de la economía durante algunos años. Además, pensamos que los valores del Tesoro continuarán ofreciendo mayores rentabilidades que la deuda de países como Alemania, Francia, Italia, España, Reino Unidos, Suecia, Suiza, Países Bajos, Canadá y Japón, por nombrar algunos. Esto hace parecer a los valores del Tesoro estadounidense atractivos en términos relativos”, apuntan.
Los dos expertos de DoubleLine Capital estiman que conforme los bancos centrales extranjeros continúen reprimiendo las rentabilidades en sus respectivos países, es probable que aumente la demanda extranjera de bonos del Tesoro estadounidense de mayor rentabilidad. Un fortalecimiento del dólar también provoca que la deuda estadounidense se vuelva atractiva para los extranjeros, ya que los bancos centrales extranjeros tienen como objetivo rebajar las divisas. Todas estas dinámicas deberían poner un límite al repunte de las rentabilidades de la deuda a largo plazo de Estados Unidos.
“En conclusión, creemos que la duración seguirá funcionando bien en 2015 dado que un menor crecimiento global y una menor inflación presionan a la baja las rentabilidades”, dicen.