La espiral de deuda de los Estados Unidos no para de crecer. En el primer semestre de 2024, dos destacadas instituciones financieras públicas -el FMI y la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO)- expresaron públicamente su preocupación por la salud fiscal de Estados Unidos y la sostenibilidad de su deuda soberana. La gestora DoubleLine, que sigue la evolución de la espiral de deuda y déficit de Estados Unidos, empezó en 2023 a compartir públicamente escenarios alternativos en los que estos desequilibrios superan umbrales críticos y que ha actualizado recientemente en este informe.
Joel Peña, jefe de desarrollo de negocio de DoubleLine para América Latina y US Offshore, ha conversado con Guadalupe Barriviera, periodista y audience developer de Funds Society (ver vídeo) sobre la trayectoria del endeudamiento de los EE.UU. y los desafíos en materia de política monetaria y fiscal y ha analizado dónde están las oportunidades de inversión.
Endeudamiento del gobierno de EE.UU.
Peña inicia la entrevista reflexionando sobre los niveles históricos de endeudamiento de EE.UU. Asegura que existen precedentes, como el elevado nivel de deuda que enfrentó el país después de la Segunda Guerra Mundial: “El país se enfrentó a altos niveles de deuda en la era posguerra, en la segunda mitad de la década de los 40”. Durante esa época, el país logró reducir la deuda del 106% del PIB en 1945 al 37% en 1965, ayudado por tasas de interés bajas y un robusto crecimiento económico del 6%. Sin embargo, advierte que la situación actual es diferente, ya que “vivimos un escenario de tasas más altas y perspectivas de utilidad fiscal menos optimistas”.
En ese sentido, Peña recalca que DoubleLine está actuando para proteger a sus clientes de los riesgos asociados a esta dinámica fiscal adversa. Peña destaca que, a pesar de que el Departamento del Tesoro de EE.UU. no ha reconocido totalmente la gravedad de la situación, es responsabilidad de las gestoras “sonar la alarma” y ayudar a los inversores a manejar estos riesgos en sus portafolios.
Retos fiscales y políticos ante las próximas elecciones
Con las elecciones presidenciales de noviembre en el horizonte, Peña anticipa importantes desafíos tanto para el gobierno como para la Reserva Federal (Fed). Del lado monetario, el experto subraya que existe el “riesgo de error de política monetaria” en el que la Fed podría mantener las tasas demasiado altas o reducirlas demasiado pronto, si bien la Fed ya ha dado el primer paso al reducir las tasas en 50 puntos básicos en su reunión de septiembre.
Desde una perspectiva fiscal, Peña comenta que el desafío que afrontará la próxima Administración pasará por “impulsar el crecimiento mientras se implementan medidas fiscales austeras”, algo que considera “muy difícil”. Además, advierte que la emisión de deuda a tasas más altas restringe la inversión en el sector privado, lo que reduce el crecimiento económico. Aporta un dato por cada dólar invertido en deuda gubernamental, se reducen 33 centavos en inversión privada, lo que destaca el dilema que enfrenta el próximo gobierno.
Perspectivas económicas: PIB, empleo y recesión
En DoubleLine se enfocan en integrar una selección ascendente de valores con análisis macroeconómico para diseñar portafolios de inversión, por lo que es sumamente importante delinear los posibles escenarios de las diferentes variables como el PIB o el desempleo. Aunque prevén una desaceleración económica que podría clasificarse como recesión, el experto observa que “el alto nivel de circulante en la economía ha contribuido enormemente a posponer este escenario”. Lo atribuye a que, a pesar de la contracción en el sector manufacturero, el crecimiento en el sector de servicios ha compensado esta debilidad. Peña advierte que, aunque el anuncio de una recesión ha tardado más de lo esperado, podría estar ocurriendo en este momento sin que lo sepamos, ya que “únicamente lo vamos a poder saber cuando los datos oficiales de crecimiento que incluyan a septiembre sean públicos”.
Escenario de tasas de interés
El equipo de expertos de DoubleLine descarta el regreso a un escenario de tasas ultrabajas como las vistas en 2009 o durante la pandemia, algo que Peña atribuye a que el estatus del dólar como moneda de reserva y la calidad crediticia de la deuda de EE.UU. parecen estar “amenazados por su pérdida de valor en el mercado global”. En este sentido, Peña sugiere que es probable que el país enfrente un escenario de “higher for longer” en lugar de “lower for longer”. Es decir, aunque una recesión podría llevar a la Fed a reducir tasas, considera difícil que volvamos a ver tasas ultra bajas.
Además, señala que las dinámicas demográficas juegan en contra, ya que una gran parte de la población está envejeciendo y saliendo del mercado laboral, lo que limita el impacto que una reducción de tasas podría tener en el consumo. Por estas razones, Peña concluye que “no creemos que la Fed considere la reducción de tasas como una herramienta tan poderosa en los próximos años”.
Oportunidades en el sector de renta fija
DoubleLine se enfoca en encontrar áreas de menor riesgo o mayor oportunidad dentro de la renta fija sector. Peña indica que, actualmente, consideran que los spreads de los bonos están “muy apretados”, lo que implica que las oportunidades podrían provenir del componente de sensibilidad a los movimientos de las tasas de interés, comúnmente denominado “duración”.
Peña recuerda que, cuando las tasas bajan, los instrumentos de renta fija tienden a apreciarse, pero en entornos de desaceleración económica o recesión, los capitales buscan refugio en bonos de mayor calidad, lo que puede limitar la apreciación de los bonos con mayores riesgos crediticios. Por esta razón, DoubleLine prefiere reducir su exposición a este tipo de deuda.
En cambio, Peña destaca que ven valor en los bonos hipotecarios, tanto de agencia como no de agencia, y tanto residenciales como comerciales. Estos bonos, emitidos cuando las tasas eran más bajas, ofrecen una oportunidad interesante ya que “limitan el riesgo de refinanciamiento conforme las tasas vayan bajando”. También, con respecto a la pérdida de valor del dólar, DoubleLine busca diversificar en activos denominados en otras monedas fuertes y considera que el oro representa una excelente oportunidad de protección: “El oro se encuentra en máximos históricos y consideramos que es una buena oportunidad de protección, comúnmente llamada hedge, para los portafolios”.
En resumen, Peña subraya que el reto para DoubleLine es balancear la búsqueda de oportunidades mientras protegen los portafolios contra escenarios imprevistos o una alta volatilidad económica.
Puede leer el informe íntegro sobre la espiral de la deuda a través de este enlace.