En lo que va de 2017, el desempeño de los pequeños valores de los mercados emergentes ha sido intenso y se ha producido un gran avance de muchos países y sectores de la clase de activos. Ha aumentado la confianza depositada en el contexto de mercado, en el clima económico y las ganancias empresariales de este tipo de compañías.
Y esta confianza, estima Templeton Emerging Markets Group, se ha forjado a pesar de ciertos desafíos, como los aumentos efectivos y potenciales de los tipos de interés en Estados Unidos, la incertidumbre generada por la nueva Administración de este país y las cuestiones geopolíticas a escala mundial.
Por eso, la firma sigue creyendo que los valores de pequeña capitalización de los mercados emergentes constituyen una propuesta atractiva en el actual entorno de inversión. Es cierto que con frecuencia ciertas ideas erróneas sobre la clase de activos empañan las fortalezas clave que debería aprovechar un gestor activo.
Stephen Dover, director de inversión, Chetan Sehgal, director de mercados emergentes globales/estrategias de pequeña capitalización, y Mark Mobius, presidente ejecutivo de la firma, aclaran, en la última entrada en el blog, algunas de estas ideas erróneas:
No se trata de una clase de activo «nicho»
A pesar de la opinión generalizada los pequeños valores de los mercados emergentes están lejos de ser una inversión nicho. Esta clase de activos representa más de 20.000 empresas con una capitalización bursátil total de más de 5 billones de dólares y una negociación diaria de más de 40.000 millones de dólares. La liquidez de los valores de pequeña capitalización de los emergentes es similar a la de los valores de gran capitalización.
“Por consiguiente, creemos que el ingente tamaño del universo de inversión de pequeños valores de los mercados emergentes supone una ventaja fundamental para los gestores activos, pues ofrece numerosas oportunidades para detectar empresas que en nuestra opinión representan valor. Estos pequeños valores están de manera desproporcionada en manos de inversores minoristas, que a menudo negocian con más frecuencia que los inversores institucionales extranjeros debido a que su horizonte de inversión es en general mucho más corto, lo que aumenta la liquidez”, explica el equipo de Mobius.
Y pone como ejemplo a la India, donde los inversores pueden elegir entre un gran número de pequeñas empresas y hay un sesgo pronunciado de la propiedad de estos valores hacia los inversores locales.
“Un diferencia clave entre los pequeños valores de los mercados desarrollados y los de los emergentes es que estos últimos, en muchos mercados, todavía presentan un marcado carácter local. Una capitalización del mercado próxima a 2.000 millones de dólares podría representar a una empresa puntera en un país, índice o sector determinado, quizás un negocio consolidado con un largo y próspero historial. Muchas de estas empresas son de propiedad o gestión familiar y muchas tienen perfiles estables si se comparan con los pequeños valores de los mercados desarrollados”, cuentan.
No es necesariamente una inversión más volátil
Otro concepto erróneo fundamental sobre la inversión en pequeños valores de los emergentes es, para Templeton Emerging Markets Group, que la volatilidad es más elevada que en las contrapartes de gran capitalización. Igual que en todas las inversiones, los pequeños valores de los emergentes entrañan riesgos reales y percibidos. Entre ellos se incluye una mayor volatilidad de los precios (especialmente a corto plazo), ingresos relativamente inferiores, líneas de producción limitadas y una pequeña cuota de mercado.
“Sin embargo, muchos de estos riesgos son aquellos asociados con el universo de la renta variable de ME en general, como la mayor volatilidad en relación con los mercados desarrollados. Un análisis de las desviaciones estándar demuestra que la suposición de que los pequeños valores de ME son mucho más volátiles que los de gran capitalización de ME no siempre es cierta”, apuntan
A pesar de que los valores individuales pueden ser muy volátiles, las correlaciones entre las distintas empresas de pequeña capitalización de ME suelen ser más bajas, lo cual “creemos que se debe en parte a la amplitud y a la diversidad de las compañías de este segmento de inversión”, concluyen.