2018 ha sido el año del «mal menor» en las carteras de los inversores, un año en el que el éxito de una inversión debe medirse por su capacidad para amortiguar las caídas de los mercados y el grado en que ha conseguido hacerlo.
En palabras de Miguel Ángel García, director de inversiones de Diaphanum, «lo importante para ganar dinero es no perderlo, así que en la medida que podamos perder poco en las correcciones del mercado lo estaremos haciendo bien». Bajo esta premisa, la cartera conservadora de la firma ha registrado una rentabilidad negativa del 2,85%, la equililbrada ha perdido un 4,2% y la más agresiva, un 6,4%.
De cara a 2019, Diaphanum cree que la liquidez se ha convertido en un puerto seguro para los inversores más conservadores ante la escasa o nula rentabilidad que les ofrecerá también este año la renta fija. «La liquidez es el mejor medio para controlar la volatilildad de las carteras y preservar el valor a la espera de oportunidades de compra». De hecho, en renta fija, solo observan cierto atractivo en la deuda corporativa high yield y en grado de inversión, sobre todo en en el caso de compañías de EE.UU.
Además, en la renta variable de EE.UU., de mercados emergentes y la temática esperan las mejores oportunidades de inversión. «Existe un potencial de revalorización que vendría del crecimiento de los beneficios y la normalización de los multiplicadores bursátiles. En 2018 los beneficios de las empresas en EE.UU. han crecido un 24% y la bolsa ha perdido un 6%, lo que nos lleva a pensar que este año debería hacerlo bien», afirma este experto.
Para invertir en renta variable estadounidense, Diaphanum prefiere utilizar vehículos de gestión pasiva que replican el comportamiento del S&P 500. «Nuestra herramienta nos dice que en EE.UU. no hay gestores que batan al índice porque, al contrario de lo que sucede en Europa, los índices están muy bien construidos. Eso, unido a las comisiones más bajas, nos lleva a utilizar ETFs para invertir en este mercado», ha explicao García.
Por último, en la construcción de la cartera equilibrada mantienen un 15% en fondos alternativos. «En fondos alternativos hay de todo, los hay muy cañón y los hay más tranquilos. Nosotros intentamos incorporar fondos de baja volatilidad con los que el retorno que esperamos no es muy alto, del 3% o el 4%. Es un peso que dobla lo que consideraríamos normal y que suple un poco el problema de la renta fija gubernamental», añade.
Los fondos de retorno absoluto se presentan también como una opción para amortiguar caídas en una cartera conservadora. Y eso a pesar de que ni siquiera en 2018 hayan conseguido mantenerse en terreno positivo. «Consiguen moderar las caídas, pero tampoco son capaces de hacer milagros», explican desde Diaphanum.
España, un crecimiento robusto pese a todo
El crecimiento de la economía española se mantendrá por encima de la media europea en 2019, aunque podría verse comprometido si se deshacen las reformas estructurales que han permitido la recuperación económica.
A los problemas estructurales que arrastra el mercado laboral, el alto endeudamiento público y privado y elevado gasto público, se unen las tensiones territoriales, el anuncio de nuevas cargas al empleo y nuevos impuestos como principales amenazas al crecimiento. “La situación exterior se ha debilitado, pero tiene margen de mejora, ya que es la parte de la economía que más se beneficia de la reducción del precio del petróleo», concluye.