La firma Criteria publica esta semana un completo análisis sobre la compleja renegociación de la deuda argentina, tema crucial para los inversores en este 2020. El gobierno argentino quiere resolver el asunto en el primer trimestre del año y para ello tendrá que conversar con muchos actores, incluyendo grandes fondos internacionales.
“El ministerio de Economía dio a conocer la última semana su hoja de ruta para llevar a cabo la negociación de la deuda. Si bien la propuesta se cocina bajo siete llaves, el gobierno despejó por lo pronto la variable temporal al hacer público su plan de trabajo para el proceso de negociación. El objetivo madre: resolver el pleito durante el primer trimestre del año. El gobierno planea realizar su propuesta formal a comienzos de marzo, tras lo cual seguirá un período de roadshow –del 9 al 22 de marzo-, para luego expirar la oferta hacia finales de mes. Sólo entonces el ministro Martín Guzmán dará a conocer los resultados de la misma”, señala Criteria.
La cámara de Diputados aprobó el 29 de enero el marco legal para la negociación. Lo hizo con mínima disidencia, y se espera un trato similar por Senadores esta semana. De fondo, la provincia de Buenos Aires coquetea con el default y extiende por unos días su plazo para reprogramar pagos.
Según datos de Criteria, Argentina cuenta con un stock de deuda pública que asciende a 310.100 millones de dólares, entre organismos públicos, privados y multilaterales. Con la capacidad de repago bajo riesgo y vencimientos de capital que se acercan, la negociación apremia.
Despejando tenedores públicos y organismos multilaterales –entre ellos el FMI, una discusión aparte–, la deuda que buscará renegociar el gobierno en primera instancia es la que mantiene con privados. Esta se ubicaba a septiembre pasado en torno a los 120.000 millones de dólares, y está denominada en un 78% en moneda extranjera. Se desconoce aún si papeles con legislación local (2/3 del total) y e internacional recibirán un tratamiento diferente.
Composición de la deuda pública con privados
Distribución de la deuda pública en manos del sector privado, por moneda y por ley
“En el interin, el gobierno busca identificar quiénes serán los integrantes que se sentarán a su mesa de negociación. Convocó formalmente a “agentes de información” a prestar colaboración en la identificación de los tenedores. Siguiendo el calendario oficial, febrero trae un nuevo capítulo: conocer a los tenedores de su propia deuda”, señala la firma.
Un interesante relevamiento de Criteria aporta a la discusión: cerca de 25.000 millones de dólares de deuda pública argentina se encuentra en manos de fondos mutuos, con el gigante alemán Allianz SE (Pimco) y los estadounidenses Franklin Resources, Blackrock y Fidelity como principales tenedores.
La tenencia de fondos mutuos extranjeros supera los 25.000 millones de dólares
Respecto a los jugadores locales (principalmente compañías de seguro y fondos comunes de inversión), Criteria identifica tenencias por al menos 1.000 millones de dólares, siendo Shroders, Consultatio y Delta los mayores tenedores de deuda dentro de la industria de FCI´s.
Así, cerca de 40 tenedores diferentes componen poco menos que un cuarto del total de deuda en poder de privados. A diferencia de otras experiencias de restructuración –como en el caso ucraniano en 2015- la deuda argentina está muy atomizada entre diferentes fondos globales, lo que de por sí complejiza el proceso de negociación.
Con múltiples acreedores, es esperable que se vayan agrupando para hacer frente a la negociación. Uno de ellos designó a UBS Securities y Mens Sana Asesores como representantes, según se supo en diciembre por medios periodísticos.
La firma argentina y latinoamericana destaca que esta semana se conoció que toma forma un nuevo grupo, esta vez compuesto por unos 20 bonistas. Contribuye allí Dennis Hranitzky, quien fuera uno de los letrados del fondo Elliot en su largo encono judicial contra el Estado argentino. Hranitzky es famoso entre litigantes por su “creatividad” a la hora de apurar los cobros. Fue uno de los responsables de la incautación de la Fragata Libertad.
El jurista dijo a la agencia Bloomberg que los bonistas claman por “un diálogo constructivo.” El correr de las semanas y la naturaleza de la propuesta del gobierno verá en qué términos se mantiene la negociación.