FlexFunds y Funds Society comparten, dentro de su iniciativa Observatorio de Tendencias, la visión de María Fernanda Magariños, la nueva directora ejecutiva de Investment Management en Sura Investments, compañía que forma parte de Grupo SURA, gestora de inversiones con 80 años de trayectoria que cuenta con presencia en México, Colombia, Perú y Chile, además de vehículos de inversión en Estados Unidos y Luxemburgo.
Magariños, actuaria de profesión, posee una fuerte motivación en canalizar recursos globales hacia el desarrollo sostenible de Latinoamérica, cerrando brechas económicas y sociales mediante la inversión. En su nuevo rol, es la responsable de diseñar soluciones de inversión para administradoras de fondos de pensiones, aseguradoras y family offices.
En un entorno económico desafiante y volátil, su estrategia se centra en construir relaciones de confianza a largo plazo y garantizar excelencia operativa, aspectos clave para clientes institucionales que deben equilibrar rentabilidad y estabilidad en la administración de recursos de terceros.
Y, para lograrlo, considera esenciales tres factores: un enfoque claro en el cliente y sus necesidades, una gestión sólida del talento para potenciar la ejecución de estrategias de inversión, y la capacidad de operar bajo estrictos marcos regulatorios sin perder flexibilidad, un aspecto crucial para mantener la confianza en mercados tan diversos como los latinoamericanos.
Tendencias en la gestión de carteras y vehículos de inversión
Magariños destaca la creciente incorporación de activos alternativos en las estrategias de inversión. Para los inversionistas institucionales, que típicamente manejan portafolios con un horizonte de inversión de largo plazo, los activos alternativos se han convertido en una parte esencial de la estrategia de diversificación. Esto se debe a que, en los mercados latinoamericanos, los activos tradicionales no siempre ofrecen la profundidad o la rentabilidad necesarias para cumplir con los objetivos de los inversionistas.
Entre los activos alternativos más populares, menciona sectores como infraestructura, deuda privada y real estate. Estos activos no solo permiten una mayor diversificación, sino que también contribuyen al desarrollo económico y al fortalecimiento de la región, lo que añade un valor adicional para los inversionistas. En este sentido, los activos alternativos ofrecen un balance entre riesgo y retorno, lo que es clave para satisfacer los perfiles de inversión de los clientes institucionales.
Otro aspecto crucial en la gestión de activos es la selección adecuada de los vehículos de inversión. Magariños enfatiza que cada tipo de cliente requiere soluciones adaptadas a sus necesidades específicas. Mientras las aseguradoras pueden beneficiarse de vehículos directos o estructurados que optimicen el capital y reduzcan requerimientos regulatorios, los fondos de pensiones encuentran mayor valor en fondos de inversión colectiva alineados con sus estructuras operativas.
La clave está en no aplicar una solución única, sino que es fundamental diseñar estrategias personalizadas que equilibren rentabilidad y riesgo para gestionar inversiones de manera eficiente y sostenible.
Según Magariños, el éxito en la gestión de activos en Latinoamérica depende de una visión estratégica a largo plazo que esté centrada en las necesidades del cliente y en la creación de relaciones de confianza. La clave está en la diversificación de carteras, incorporando activos alternativos que proporcionen una mayor estabilidad y rendimiento. Además, las soluciones de inversión deben ser flexibles y adaptables, con una fuerte presencia local que permita cumplir con las regulaciones locales sin sacrificar la eficiencia.
Por tanto, la optimización del uso del capital, la gestión adecuada del talento y la capacidad de adaptarse a un entorno en constante cambio, serán fundamentales para seguir fortaleciendo la gestión de activos en la región, donde los activos alternativos serán clave para garantizar el crecimiento y la sostenibilidad de los portafolios institucionales.
Qué activos dominarán el futuro
Mirando hacia el futuro, María Fernanda identifica un instrumento financiero clave para los inversores en 2025: la deuda privada. Este instrumento no solo diversifica carteras, sino que también ofrece rendimientos atractivos en un entorno de menor oferta de opciones tradicionales. Además, el creciente interés por activos alternativos refuerza su rol en la gestión del riesgo y la optimización de retornos.
Cuentas manejadas por separado (SMA) vs. vehículos de inversión colectiva
Para Magariños, tanto las cuentas manejadas por separado como los vehículos de inversión colectiva tienen un papel relevante y deben coexistir en el mercado. Esta flexibilidad permite adaptar las soluciones a las necesidades específicas de los inversionistas. Sura Investments, por ejemplo, ofrece una amplia gama de soluciones de inversión, desde activos alternativos latinoamericanos hasta fondos de terceros que invierten en activos globales, adaptándose tanto a las exigencias de las aseguradoras como a los fondos de pensiones y family offices.
Cuando se le pregunta sobre los factores más importantes que priorizan los inversores al momento de tomar decisiones, Magariños destaca dos elementos clave: la calidad del gestor y la excelencia operacional.
Los inversionistas están cada vez más enfocados en el perfil de los gestores, buscando experiencia probada y un track record sólido en las estrategias de inversión. En este sentido, el desempeño de la empresa no solo se mide por los rendimientos, sino también por la capacidad de entregar una operación eficiente y una reportería oportuna, que son esenciales para cumplir con las normativas y expectativas regulatorias de los inversionistas institucionales.
En ese sentido, las principales habilidades que un asesor debe tener según Magariños son la escucha activa, la comunicación efectiva y mantener un interés genuino por aprender. Y, en SURA Investments, estas habilidades son muy relevantes, dado que entregar una asesoría experta a sus clientes constituye el eje central de su oferta de valor y la manera de alcanzar los objetivos financieros de los clientes.
Pero en todo este contexto, Magariños agrega que no se debe olvidar el avance de la inteligencia artificial, el que se está convirtiendo en el nuevo motor del asset management, dado que su capacidad de análisis de datos ha mejorado la personalización de las soluciones de inversión y optimizado la toma de decisiones, lo que a su vez ha permitido crear productos de acuerdo a las necesidades de los clientes, haciéndolos más competitivos y eficientes.
Entrevista realizada por Emilio Veiga Gil, Vicepresidente Ejecutivo de FlexFunds, en el contexto del «Observatorio de Tendencias» de FlexFunds y Funds Society.