Los activos peruanos y la divisa local podrían sufrir las consecuencias de la inesperada destitución del presidente Martín Vizcarra y, aunque los riesgos de solvencia son todavía bajos, el país andino podría quedar fuera del rally de países emergentes y estar expuesto a flujos de salida, comentaron varios expertos a Funds Society.
El día 9 de noviembre, y de forma inesperada, el Congreso peruano aprobó la vacancia contra el presidente Vizcarra por 105 votos a favor y 19 en contra, por su vinculación a casos de corrupción. El cargo ha sido asumido por el presidente del congreso, Manuel Merino, que ha tomado posesión como nuevo presidente de Perú la mañana del día 10 de noviembre.
Para el equipo de Research de bonos soberanos de BBVA este hecho “eleva el ruido político del país al siguiente nivel, elevando la prima de riesgo y añadiendo presión a los activos peruanos, a pesar de los todavía bajos riesgos de solvencia”.
Vizcarra, que ha declarado que no emprenderá acciones legales, abandona de esta forma el cargo, algo valorado positivamente desde BBVA porque “enfría los riesgos de una mayor escalada, aunque sigue siendo elevado”. Además, el banco español, en un informe dedicado a Perú puntualiza que el foco estará centrado ahora en la reacción social “apaciguar el ruido será fundamental para contener la reacción de los mercados”.
La designación del ministro de Finanzas es clave
Con respecto al nuevo presidente, Daniel Velandia, CFA Head of Research y Chief Economist de Credicorp Capital explica en un informe la trayectoria política del nuevo mandatario y hacia donde puede encaminarse la política peruana.
“Merino ha apoyado la mayor parte de las medidas populistas que han sido propuestas por el Congreso recientemente (retiros de AFPs, suspensión de peajes, suspensión de pago de deudas bancarias), lo que implica un alto riesgo de que propuestas de este corte se mantengan durante los próximos meses. De hecho, debe recordarse que el Ejecutivo es la rama del poder público con el poder de vetar/observar normas aprobadas por el Congreso, particularmente aquellas que tienen impacto fiscal”, explica Velandia
Sin embargo, Velandia apunta que la composición del futuro gabinete, y la designación del ministro de Finanzas en concreto, será decisivo para tener una mayor visibilidad sobre la postura del nuevo presidente y la valoración que del mismo hagan los mercados financieros y las agencias de calificación.
De la misma opinión, es el equipo de BBVA Corporate & Invesment Banking, quien en su informe añade, además, que el enfoque del nuevo gobierno en cuanto a responsabilidad fiscal y estabilidad financiera será muy importante, a la espera de las elecciones el próximo mes de abril.
“Los mercados seguirán de cerca cualquier decisión de política económica dada la reciente aprobación de leyes en el Congreso que afectan la sostenibilidad fiscal y la estabilidad del mercado (dos rondas de retiros de fondos de pensiones privados). Cualquier intento de continuar profundizando tales políticas crearía más perturbación del mercado. En cualquier caso, la perspectiva de elecciones en abril de 2021 (tanto en el Congreso como en la Presidencia) podría desempeñar un papel clave para evitar que los mercados exageren la importancia del gobierno temporal en la gestión económica de mediano a largo plazo del país”, declara.
Así, durante los próximos meses, se espera que haya una mayor incertidumbre sobre riesgos regulatorios y no se descartan la adopción de medidas más populistas, aunque desde Credicorp Capital no creen que se está poniendo en duda el modelo económico.
“Dado que incluso los congresistas de izquierda no han estado hablando de temas como la nacionalización de la banca o la independencia del Banco Central, creemos que se mantendrá un amplio consenso sobre el modelo económico. Así, nuestro escenario base continúa asumiendo que las instituciones económicas seguirán siendo fuertes después de esta agitación política”, concluye el informe de Credicorp capital.
Impacto en los mercados
En cuanto al impacto en los mercados financieros, los expertos esperan un impacto negativo para los activos de riesgo peruanos y divisa.
En concreto, desde Credicorp Capital esperan que en el corto plazo “los activos de riesgo peruanos tengan un peor comportamiento relativo en el corto plazo ante la mayor incertidumbre y la probabilidad de más medidas populistas que podrían tener un impacto en el crecimiento económico futuro y en las cuentas fiscales”.
En esta misma línea, están las expectativas de BBVA que creen que Perú «se quedará fuera del rally de los mercados emergentes y estará expuesto a flujos de salida”. En concreto, esperan un mayor pronunciamiento de la pendiente de la curva de gobierno, que, unido a los efectos del segundo retiro de los fondos de pensiones, hará muy probable que el Banco Central peruano reanude su programa de QE.
En el caso del sol peruano, tanto desde Credicorp como desde BBVA, no descartan una intervención del Banco Central de Perú, que cuenta con un elevado nivel de reservas aunque BBVA estima que “puede que las autoridades decidan no luchar contra la dirección del peso completamente”. Así, el Banco Central “tendrá la llave en relación a los ajustes del mercado en los próximos días, pero una mayor tranquilidad a largo plazo es improbable, dado el entorno político cambiante”, concluye el informe de BBVA.