Dadas las elevadas valoraciones de la renta variable estadounidense, muchos inversores se están planteando si es el momento de rotar sus carteras hacia la renta variable europea. Ahora bien, ¿cómo hacerlo? Francis Ellison, client portfolio manager de Columbia Threadneedle Investments, ha viajado recientemente a España para ofrecer una actualización de uno de los fondos estandarte de la firma, el CT (Lux) Pan-European ESG Equities.
Este es un fondo de renta variable paneuropea con una estrategia de cartera concentrada (habitualmente entre 50 y 60 valores). El equipo gestor aplica un análisis bottom-up muy centrado en la identificación de negocios que ofrecen características de crecimiento y calidad. “Buscamos compañías cuyo modelo de negocio apunte a que puedan tener un tamaño superior dentro de diez años, lo que significa que tienen que hacer algo de forma excepcional”, detalla Ellison.
Esta búsqueda de valores remite a la identificación de empresas que puedan contar con una ventaja tecnológica competitiva, una marca fuerte, altas barreras de entrada, una plataforma dominante o una combinación de estas características que haga que su modelo de negocio sea muy difícil de replicar por la competencia. Ellison pone como ejemplo de modelo de negocio muy difícil de replicar a On Location, la compañía que gestionó la venta de entradas para los JJOO de París y que también se encargará de Los Ángeles 2028, así como de otros eventos deportivos de gran calado, desde la Super Bowl al Mundial de 2026.
Actualización de la estrategia
¿Cómo está posicionada la cartera del CT (Lux) Pan-European ESG Equities? Ellison aclara que la visión del equipo no es “demasiado positiva” actualmente respecto al tono de la economía europea. Esto se debe a que, si bien ha arrancado un nuevo ciclo de bajadas de tipos de interés que debería apoyar a las economías de la eurozona, hay más elementos a tener en cuenta, partiendo de los lazos comerciales que mantiene Europa con otros países que sí están en una situación económica más delicada, como Estados Unidos o especialmente China.
“No pensamos que vaya a haber una gran recesión, pero no creemos que EE.UU. vaya a crecer muy rápido. China tiene problemas de crecimiento, pero también problemas regulatorios”, indica Ellison. Como resultado, han dejado de invertir en compañías europeas que en el pasado exportaban con éxito a China artículos como alcohol o automóviles. Sí han mantenido posiciones en compañías ligadas a la moda y el lujo, como LVMH o Hermès.
El experto también destaca el incremento de los riesgos geopolíticos para las compañías europeas, lo que ha implicado un cambio en “el énfasis” a la hora de gestionar la estrategia. Pone como ejemplo que, por primera vez en los 17 años que lleva trabajando en la compañía, el equipo gestor ha empezado a invertir en compañías europeas del sector de Defensa.
Otro gran cambio remite a la posición en compañías reaseguradoras: de no estar presentes en el fondo hace dos años, han pasado a ocupar una posición importante de la estrategia. “Son interesantes negocios B2B con una buena estructura de coste, son jugadores dominantes en el mercado que conocen a sus clientes y pueden utilizar su capital efectivamente, y que se han beneficiado de unos tipos de interés más elevados”.
Sin embargo, aunque el equipo gestor reconozca la presencia de los riesgos, Ellison aprovecha para reivindicar el valor del stock picking: “El mayor riesgo para la estrategia es que no hagamos bien nuestro trabajo. Nuestro negocio consiste en seleccionar negocios de éxito, y los fondos que tienen éxito son como las empresas más exitosas”.
La industria de gestión activa está escorando hacia la excelencia
Francis Ellison inició su carrera profesional en 1983, y lleva desde 2007 en Columbia Threadneedle Investments. El experto muestra una gran amplitud de miras para reconocer qué ha cambiado en la manera de hacer negocios en la industria. Y los cambios son notables: afirma que hace unos 20 años era más fácil porque “no había mucha competencia, la mayoría de los clientes no eran demasiado exigentes, los riesgos procedentes de los fondos indexados no estaban ahí y era más fácil operar”. Hoy, en cambio, considera que la excelencia tiene que ser un requisito imprescindible para operar en el mercado: “Es necesario hacer algo que sea diferente y desarrollar internamente un trabajo que añada valor, por eso hacemos nuestro propio research y la manera en que lo hacemos es probablemente más importante que dónde lo hacemos”.
El experto también habla de que ahora “el enfoque de los clientes ha mejorado mucho”, en el sentido de que ya no funciona ofrecer un producto similar al de otros en el mercado porque “es lo que está haciendo todo el mundo”, sino que es mandatario para las firmas ofrecer productos distintivos, en los que se refleje una forma particular de trabajar. “En cierto modo eso nos encaja porque es lo que buscamos en las compañías en las que invertimos. Buscamos compañías que hagan algo excepcional, y después le ofrecemos algo excepcional a nuestros clientes”, resume.
Para Ellison, dos aspectos clave en el negocio de Columbia Threadneedle han sido su fuerte posicionamiento desde hace 20 años como casa que apuesta por la integración de criterios ESG en toda su gama de producto. “ESG forma parte integral de nuestro proceso de selección. No porque queramos ser buena gente, sino porque nos ayuda a seleccionar empresas que han optado por una forma de operar que a la larga va a beneficiarles”, comenta Ellison, que destaca la importancia de que los fondos estén clasificados como Artículo 8.
En último lugar destaca la posición dominante de la gestora en la small caps, al ser uno de los mayores managers en este segmento del mercado. El dato es relevante porque este segmento de la renta variable ha presentado un comportamiento peor al de las grandes capitalizadas en los últimos cinco años, lo que ha llevado a un gran pesimismo de los inversores en torno a la clase de activo, que actualmente está infra representada en la mayoría de carteras. “La rentabilidad relativa de las small caps está fuertemente vinculada a la trayectoria de los tipos de interés por el diferencial entre growth y value. La mayor parte de los inversores compran small caps por el crecimiento, y éste ha estado muy caro desde 2021 respecto al value”, explica.
Sin embargo, el experto considera que el momento actual ofrece un buen punto de entrada para los inversores interesados en retornar a esta clase de activo: “Pensamos que la calidad, que es la parte del growth en la que invertimos, debería presentar el mejor comportamiento en un entorno de crecimiento macroeconómico más lento”, concluye.