A pesar de la recuperación económica del segundo trimestre favorecida por la campaña de vacunación, los datos relativos a España no se encuentran todavía en los mismos niveles prepandemia. No obstante, desde Credit Suisse auguran que la economía española recuperará terreno rápidamente a lo largo del próximo año: «Prevemos que la economía siga creciendo un 5,8% el próximo año después del 4,4 % de este año, impulsada por el gasto de los consumidores y de las empresas a medida que disminuyen las elevadas tasas de ahorro».
A lo que habrá que añadir en 2022 el impulso de la recepción de los fondos desembolsados en el marco del Fondo de Recuperación de la UE y la vuelta a las tasas de desempleo previas a la crisis gracias al sólido mecanismo de los ERTE.
En este sentido, también se presentan distintos riesgos que pueden suponer un baipás para el crecimiento de la economía española. El gasto de los consumidores podría detenerse por los altos precios del gas y de la energía si persisten hasta el 2022, con la consiguiente subida de precios del mercado. Asimismo, un riesgo adicional sería la necesidad de un ajuste fiscal en 2023. Desde la gestora suiza señalan que el déficit de España se mantendrá probablemente por encima del 5 % del PIB el próximo año. Con una ratio deuda/PIB cercana al 120%, España podría verse presionada a tomar medidas de consolidación de sus finanzas públicas una vez que vuelvan las exigencias del Pacto de Estabilidad y Crecimiento en 2023.
Por otra parte, se espera que las acciones españolas ofrezcan buenos rendimientos en 2022. Sus fundamentos siguen siendo atractivos, sobre todo si están impulsados por un mayor «breakeven inflation», y se apoyan en las expectativas del repunte del sector servicios; más concretamente del ocio, los viajes y el turismo. Aunque el alza estará limitada por las perspectivas de la política del Banco Central Europeo.
Por último, sobre el euro mantienen una visión de duración corta. «El carácter cíclico del EUR debería ser un factor favorable en nuestro escenario de reflación mundial previsto. Por último, consideramos que el enfoque fiscal común de la UE durante la crisis es un factor que favorece al EUR a largo plazo. No obstante, la ventaja de las tasas en EE.UU. mantendrá controlado el euro-dólar y esperamos un rango de negociación lateral del EUR/USD», concluyen en Credit Suisse.