Cualquiera que se haya aventurado en el mercado latinoamericano de renta variable en 2015 sabe que hacerlo durante periodos de agitación política, requiere un saludable apetito por el riesgo. Los índices de los mercados bursátiles de Perú y Brasil están reportando las mayores ganancias de este año, pero también se encuentran entre los más volátiles.
Existe otra manera de subirse al rally, sin tener que sufrir tantos altibajos: invertir en Chile. La diversidad de las empresas chilenas cubre un amplio espectro, desde botellas, pulpa de papel, a camisetas que se venden en toda Latinoamérica. Esto hace del índice chileno un substituto para aquellos inversores que quieren beneficiarse del optimismo de las próximas elecciones presidenciales en Perú, de un nuevo jefe de estado en Argentina y de la posible destitución de la presidenta de Brasil, que marcará el comienzo de unos gobiernos más favorables para los mercados. Según publica Bloomberg, diecinueve de los cuarenta títulos del índice chileno IPSA obtienen un porcentaje significativo de sus beneficios de alguna de estas tres naciones.
Mientras las ganancias del mercado bursátil chileno no son tan impresionantes como las del índice Ibovespa de Brasil o del Índice General de Perú -un 16% de rendimiento expresado en dólares frente a más de un 42%-, el pasado año, el índice IPSA resistió mucho mejor la caída mundial de los mercados emergentes que el resto de países de la región. Es por eso que, los inversores extranjeros que quieren participar del rally derivado de la agitación política, pero que no quieren soportar tanto riesgo como en Argentina y Brasil, o buscan más liquidez que en Perú, quieran participar en el mercado chileno como una alternativa atractiva.
Existen numerosas empresas chilenas cuyos ingresos son generados en Argentina, Brasil y Perú. Por ejemplo, Cencosud SA, el tercer negocio de venta minorista más grande de la región opera en cinco países, la empresa de tecnología Sonda SA obtiene un 39% de sus ingresos en Brasil, la empresa eléctrica Enersis Americas SA tiene un 43% de su capacidad instalada en Argentina. Así mismo, Ripley Corp obtiene un 33% de sus ventas minoristas de los consumidores peruanos; y SACI Falabella tiene 136 tiendas y 14 centros comerciales en el país andino.
Los flujos de entrada en los fondos chilenos han comenzado a crecer después de años de salidas. El ETF de iShares MSCI Chile Capped ha recibido 117 millones de dólares en entradas de dinero en 2016 y no ha tenido salidas desde enero de este año.
Chile es también el mayor mercado menos volátil de la región. La volatilidad en 30 días bajó hasta los 10.1. Mientras que, en Brasil, ésta creció hasta los 35 puntos a la vez que el Senado consideraba proseguir con el proceso de destitución de la presidenta Dilma Rousseff. En Perú la volatilidad de los últimos 30 días se situaba en un 33%, debido a que todavía está pendiente la segunda ronda presidencial de las elecciones de junio; y en Argentina se situaba en un 39%, después de su vuelta a los mercados internacionales de deuda, consecuencia de la elección de Mauricio Macri en noviembre.