Como cada año electoral, se pueden anticipar cambios en varios ámbitos. La llegada de una nueva administración puede impactar en las políticas macroeconómicas y estructura financiera del país. De igual forma, la nueva composición del Congreso podrá influir en dichas verticales. El tipo de cambio, así como el mercado accionario suelen reflejar la incertidumbre a través de incrementos en la volatilidad, la cual suele matizarse una vez concluidos los comicios.
Desde GBMhomebroker, analizaron el comportamiento de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) en los seis meses previos y los seis meses siguientes al día de las elecciones, considerando como muestra los tres últimos años electorales (2000, 2006 y 2012):
En el año 2000 se puede ver que el peso se mantuvo relativamente estable durante todo el año, con ligera presión en el trimestre anterior a las elecciones, pero después de estas se estabilizó prácticamente en los mismos niveles. En cuanto al IPC, éste mostró un ajuste previo a las elecciones, en sincronía con otros mercados a nivel global. Este comportamiento GBMhomebroker lo atribuye a la burbuja “.com”, la cual vio el principio de su fin en estas fechas, teniendo impacto en más latitudes.
En el año 2006, al igual que en el 2000, la evolución el tipo de cambio vio un alza de un dígito (4%) durante la primera mitad del año. Sin embargo, el IPC sí se vio presionado en los dos meses previos a elecciones. Pasado el periodo electoral, se nota que el mercado reaccionó de manera positiva y la bolsa acumuló una ganancia de 48% en el año. En la gráfica del lado derecho se puede ver cómo el SPX evoluciona con la misma tendencia, aunque con una menor magnitud.
A diferencia de años anteriores, durante el 2012 el peso mostró volatilidad en sentido opuesto, previo al proceso electoral, incluso con ganancias de 10% entre febrero y marzo. Una vez que pasaron las elecciones, el tipo de cambio continuó con fortaleza y el IPC retoma una tendencia alcista, cerrando el año con una ganancia del 18%.
“Si bien los años electorales suelen venir acompañados de volatilidad, es necesario tener en cuenta que los factores externos y las fases del ciclo económico global seguirán jugando un papel relevante. Los inversionistas suelen anticipar de manera exacerbada la incertidumbre, en cualquier sentido, por lo que una vez disipada la formación de precios podrán descontar escenarios más acordes” comentó Iván Barona, director de GBMhomebroker.