Luego de las elecciones presidenciales en México, los mercados mexicanos han entrado en una fase de volatilidad no tanto por la victoria de la candidata oficialista sino por la eventual composición del Congreso, que sería dominado totalmente por el partido en el poder. No obstante, los analistas de Citi Research reiteraron su índice objetivo para el S&P/BMV IPC de 60.000 y 65.000 puntos para final de año y mediados del 2025, respectivamente.
Al respecto, el equipo de estrategas de Citi Research comentaron lo siguiente en su reporte sobre análisis de inveriones: “La incertidumbre de los inversionistas podría permanecer en el mercado, se mantiene la expectativa de que los recortes a la tasa de referencia podrían apoyar el desempeño de la renta variable local, la relación riesgo/rendimiento podría no ser tan favorable en los siguientes seis meses y aún hay incertidumbre en cuanto a las elecciones en EUA”.
Las turbulencias en los mercados mexicanos se mantiene esta semana en el inicio de los trabajos de transición entre el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador y la nueva mandataria Claudia Sheinbaum, quien tomará posesión del cargo el próximo 1 de octubre.
Mercado con diversificación de riesgos
Para los expertos de Citi, el mercado mexicano mantiene un buen nivel de diversificación de riesgos en estos momentos, algo clave para momentos de turbulencia como los que se viven.
Las empresas que pertenecen al índice de referencia tienen una generación de ingresos en el país de 64%,
mientras que el 36% de sus ingresos están expuestos al extranjero (el tipo de cambio también registra momentos de volatilidad).
«Aunque el número no es tan alto, al observar la participación de ingresos por sector podemos notar que las empresas de materiales, servicios de comunicación y consumo básico tienen un mayor porcentaje de ingresos en el extranjero por lo que, en términos fundamentales ofrecen cierta diversificación», explican los expertos.
«Además, dentro del índice, empresas como Orbia, Cuervo, GCC, Peñoles, Alfa y AMX tienen más del 50% de ingresos fuera del país, por lo que también a nivel táctico se podrían considerar opciones en la renta variable local», señalan.
«Por otra parte, en términos generales y hablando del movimiento del índice con respecto al desempeño de la moneda local, también podemos notar que hay cierta correlación inversa entre el desempeño del peso con respecto a la renta variable local. Lo anterior, debido a que, en la historia, tanto de corto y mediano como de largo plazo, cada vez que hay una depreciación del peso mexicano, la renta variable tiende a ajustarse», dijeron los analistas en su reporte.
Cobertura ante aumento de la aversión al riesgo
Los analistas de Citi Reserach mencionaron que lo anterior se explica por la aversión al riesgo que muestra la moneda local cuando los inversionistas se refugian en el dólar y, a su vez, también tienden a vender la renta variable.
En este sentido, es importante mencionar que ante los eventos extraordinarios y de más volatilidad se pueden observar las variaciones más significativas en la bolsa y en el peso como sucedió el pasado 3 de junio, cuando el
peso se depreció 3,9% y la bolsa cayó 6,1%.
La mayor parte de las observaciones diarias en los últimos 20 años entre el movimiento de la bolsa y el peso se ha
ubicado en un rango del 2%. La correlación entre ambas variables ha sido entre -0.34 y -.43.
«Así, es claro que estar invertido en dólares podría ofrecer cobertura ante ajustes a la renta variable local y en términos fundamentales, se pueden buscar empresas con exposición de ingresos a nivel internacional», concluyen los analistas en el reporte.