Las empresas chinas parecen las mejor posicionadas para dejar atrás, es decir antes y en mejores condiciones, la pandemia del coronavirus. Esta es la principal conclusión que arroja el último sondeo de opinión realizado por Fidelity International, en el que han participado 152 analistas de renta variable y renta fija.
Los encuestados aseguran que la crisis del coronavirus recortará los beneficios de las empresas que normalmente cubren. En concreto, el 85% de los analistas de China prevén que el impacto se limite al primer semestre del año. En otras regiones, el 42% de los encuestados espera que los efectos del COVID-19 se prolonguen también durante la segunda mitad de 2020.
No obstante, pese a que el 87% de los analistas de China prevé que el virus afecte a los beneficios, el porcentaje más alto en todas las regiones, también esperan que su magnitud sea menor que en otras áreas geográficas. Así China sería la zona que antes se recuperará, pero donde el impacto en los beneficios de sus empresas será mayor.
“Dado que China fue el primer país aquejado por el virus, parece lógico que sea el primero en recuperarse, pero el tiempo necesario para reactivar la actividad empresarial en países que están luchando con el virus también dependerá en gran parte de las medidas de contención que adopte cada gobierno”, señala Fiona O’Neill, directora adjunta del departamento de Análisis de Renta Variable de Fidelity International.
En este sentido, las medidas de restricción de los desplazamientos en las áreas afectadas, impuestas por el gobierno chino en una fase relativamente temprana del brote, provocaron un bajón generalizado en el sistema, pero también han hecho posible “una recuperación relativamente rápida y con un impacto menor en el conjunto de los beneficios, siempre que no se produzca una segunda oleada del virus”, subraya O’Neill.
Mientras, en los países occidentales, los esfuerzos se han centrado en ralentizar la propagación, pero evitando los cierres económicos durante el mayor tiempo posible. O’Neill asegura que la diferencia entre los enfoques es difícil de predecir en estos momentos.
El sector tecnológico: en condiciones de gestionar las perturbaciones causadas por el virus
Otra área del mercado que parece estar en mejor situación que otras para gestionar las perturbaciones provocadas por el virus es el sector tecnológico. En este sector, los analistas esperan que el golpe a los beneficios sea más leve que en otros sectores.
“El sector tecnológico cuenta con ingresos más recurrentes que atenuarán los posibles problemas de liquidez, mientras que los subsectores como los videojuegos y el teletrabajo recibirán un impulso mientras los países intentan limitar los viajes y los contactos sociales”, añade O’Neill.
Además, la experta también señala que estas empresas se encuentran entre las más preparadas para un posible aumento del brote: ya existe una cultura de teletrabajo y cuenta con la tecnología necesaria para trabajar a distancia con normalidad.