Todo parece indicar que los mercados emergentes están llamados a liderar el mundo de mañana. Este universo de inversión se ve impulsado por un mejor rendimiento respecto a los mercados desarrollados, la mejora de sus fundamentales y una mayor confianza de los inversores, según Carmignac.
La gestora francesa piensa que la creciente influencia internacional de los mercados emergentes en los últimos años, unido al buen comportamiento de algunas de sus economías en la gestión de la pandemia de coronavirus, han convertido a estas regiones en terreno fértil para los inversores en busca de crecimiento.
Según Carmignac, los efectos del confinamiento han facilitado la innovación tecnológica en los mercados emergentes, beneficiando a actores relacionados con la provisión de servicios digitales.
Si bien todas las miradas solían haberse centrado hasta ahora en Estados Unidos, la gestora opina que los mercados emergentes son hoy, y seguirán siendo, hogar de los grandes ganadores de la denominada cuarta revolución industrial: la revolución digital impulsada de la mano de la disrupción tecnológica, que está transformando todas las industrias y sectores de la economía.
El potencial de crecimiento de los mercados emergentes
Carmignac señala que, en 2020, los mercados emergentes han registrado un mejor desempeño que los mercados desarrollados tras una década de rentabilidades inferiores. La gestora piensa que este buen rendimiento continuará en los próximos meses ya que, a pesar del rendimiento superior en 2020, los mercados emergentes deberían seguir recuperando el terreno perdido tras esa década de rendimiento inferior.
El universo de los mercados emergentes se ve impulsado hoy principalmente por el nordeste asiático, que ha gestionado con más éxito que el resto del mundo la pandemia de la COVID-19. En este apartado, la gestora subraya cómo algunos países han sido capaces de lograr crecer en 2020 al tiempo que aplicaban programas de estímulo de una envergadura considerablemente inferior al de los mercados desarrollados, lo que significa que la calidad del crecimiento registrado fue mayor.
Otra dinámica que actúa como motor de crecimiento en los países emergentes es la mejora de los fundamentales macroeconómicos, según Carmignac. En este sentido, la gestora destaca que muchos países de este universo de inversión han visto cómo sus balanzas por cuenta corriente pasaban del déficit al superávit, como en el caso de Brasil. “A medida que progresa la reapertura de las economías y que avanzan las campañas de vacunación, creemos que esta tendencia positiva se mantendrá. Por tanto, somos cada vez más optimistas sobre las perspectivas de los mercados emergentes en 2021”, apunta Carmignac.
La gestora francesa también pone de manifiesto que los mercados emergentes son percibidos ahora por los inversores como algo más que una oportunidad cíclica, dejando a un lado las preocupaciones por su excesiva dependencia de la exportación de materias primas. En opinión de Carmignac, el desarrollo económico continuado de los mercados emergentes “implica realizar reformas estructurales a largo plazo que permitan diversificar realmente sus economías.”
Disrupción tecnológica y soluciones verdes
Desde sus inicios en 1989, Carmignac ha tenido a los mercados emergentes como uno de los temas centrales en su universo de inversión. La gestora siempre ha creído en el potencial de crecimiento de estas regiones, con independencia de la coyuntura internacional, y ha mantenido sus convicciones incluso en periodos en los que parecían no encontrarse argumentos para invertir en estos mercados.
En la actualidad, Carmignac defiende que las mejores oportunidades de inversión en los mercados emergentes se encuentran entre los ganadores de la cuarta revolución industrial acelerada por la disrupción tecnológica, sobre todo en Asia, y en aquellas empresas dedicadas al desarrollo de soluciones verdes.
La gestora invierte en empresas ligadas al mundo digital, principalmente en aquellas que se enfocan en el desarrollo de servicios relacionados con el comercio electrónico, el almacenamiento en la nube, o el internet de las cosas. Asimismo, cuenta con una presencia relevante en las compañías líderes en la manufacturación de semiconductores, un componente esencial en muchas de esas innovaciones tecnológicas que están transformando el mundo.
En el apartado medioambiental, Carmignac está apoyando a compañías dedicadas a la producción de baterías para coches eléctricos, un sector con barreras de entradas significativas y cuya relevancia irá en aumento a medida que los vehículos electrónicos se introduzcan de manera masiva en el mercado.
Si quiere obtener más información sobre la visión de Carmignac sobre los mercados emergentes, le invitamos a descubrir los aspectos clave de su estrategia de renta variable emergente.