BlackRock ha puesto el foco en la economía real en su estrategia de inversión de cara al segundo semestre del 2024. Así lo reconoció Javier García Díaz, responsable de ventas de BlackRock para Iberia, en la presentación de perspectivas de la firma para el segundo semestre del año.
«Estamos en momentos interesantes con retos y oportunidades para el inversor», aseguró García Díaz, que admitió que la firma muestra una preferencia por el riesgo, «pero con control» y que hay que estar atentos a las oportunidades que van a aflorar en este nuevo régimen económico. «Los recursos, en estos momentos, se invierten en las megafuerzas económicas, como la inteligencia artificial o la desglobalización, que general ganadores y perdedores», asegura.
La apuesta por la economía real se concreta con las oportunidades que ve la firma en los centros de datos para la inteligencia artificial, «que crecerán entre el 60% y el 100% en los próximos años»; también en la transición energética, con necesidades por 3,5 billones de dólares, y la reconfiguración de las cadenas de suministro. «La economía real va ganando terreno a la economía financiera y beneficia a las infraestructuras y a la industria», señala el experto.
El riesgo, para García Díaz, debe ser «táctico», e un buen momento para invertir que se caracteriza por un contexto de crecimiento por debajo de la tendencia, datos de inflación superiores a la media, alta deuda y elevados tipos de interés.
El posicionamiento en renta variable -un activo que lo está haciendo bien este año por la tecnología y unos buenos beneficios empresariales- pone el foco en Japón, la inteligencia artificial, las compañías de calidad, los mercados emergentes -eso sí, de forma selectiva- y, de forma tímida, en Europa.
1.- Japón: El país se ve favorecido, según el experto de BlackRock, por una política monetaria más favorable, una recuperación de la economía, inflación sana y reformas estructurales para los accionistas e inversores. «Aconsejamos un posicionamiento del 10% del total de la cartera a Japón», sentencia García Díaz.
2.- Inteligencia artificial: «Seguimos sobreponderando este sector y aumentamos nuestra convicción», asegura el experto, que se apoya en los sólidos beneficios de estas compañías. «Creemos que aún estamos en una fase muy inicial de la IA; las tecnológicas están invirtiendo mucho y en próximas fases, se incorporarán al desarrollo de la IA las telecomunicaciones, la salud y las finanzas y ya en una fase posterior, calará en la economía real», asegura. García Díaz desvela que la IA añadirá en el futuro 1,5 puntos porcentuales al año al PIB de Estados Unidos.
Las oportunidades en este sector están, según el experto, en protección de datos y ciberseguridad; infraestructuras tales como centros de datos, semiconductores y refrigeración y, finalmente, energía, por el elevado consumo de esta tecnología.
Eso sí, también desvela riesgos como la capacidad de la red eléctrica para satisfacer la demanda de energía; la regulación o los posibles cuellos de botella en el suministro y producción de metales necesarios para la inteligencia artificial, como el cobre.
3.- Compañías de calidad: Las empresas con balances saneados y capacidad de inversión son los principales objetivos de BlackRock. Donde abundan es, según la firma, en tecnología y sector del lujo.
4.- Mercados emergentes: La posición que García Díaz aconseja en mercados emergentes es «selectiva» con India como principal protagonista, tras las últimas elecciones, en las que venció el presidente Narendra Modi. «Ha habido volatilidad en el mercado indio, pero valoramos que su población es joven; hay una fuerte inversión en cadenas de suministro y existe un flujo de inversión de ETFs de renta variable del país», asegura. Su apuesta por India incluye, además de la bolsa, la renta fija del país.
5.- Europa: El posicionamiento de la firma en Europa aún es «tímido». En esta zona, hay aspectos destacables, según García Díaz, como una mejor situación del sector bancario; la industria del automóvil pesa menos en los índices que en el pasado y las compañías internacionales son ahora mejores. «Estamos tímidamente constructivos: preferimos bancos, salud y lujo en Europa», afirmó el experto.
En renta fija, la firma sobrepondera los bonos estadounidenses de corto plazo y está aumentando duración en la renta fija europea, teniendo en cuenta que el BCE ya ha bajado los tipos de interés y que en Estados Unidos la inflación aún sigue elevada. El posicionamiento es neutral en crédito -tanto en investment grade como en high yield- mientras que emergentes son selectivos, de nuevo con India como mercado favorito.
Los mercados alternativos se erigen como otra de las apuestas de BlackRock ante el fuerte crecimiento previsto: en los próximos años los activos se duplicarán. Este crecimiento vendría, según el experto, por el acceso más fácil a este tipo de activos a través de productos como los Eltif, mejoras en la tecnología y la reducción progresiva de las compañías cotizadas -desde 2009 hay un 20% menos de compañías en los parqués mundiales-. «Es una apuesta clara, como lo demuestran las dos últimas compras corporativas de BlackRock: el fondo de inversión GIP y el proveedor de datos de mercados privados Preqin.