Jing Ning, manager del Fidelity Funds China Focus Fund, sigue siendo optimista sobre las perspectivas de crecimiento estructural a largo plazo de China. La gestora mantiene su enfoque orientado al valor intrínseco en un entorno volátil y considera que el gobierno cumplirá con su agenda de reformas. En esta entrevista explica también por qué cree que el proyecto «One Belt, One Road» podría ser uno de los más importantes en toda una generación, y no sólo para China, también para toda Asia.
Desde la oficina de Hong Kong en la que trabaja habla largo y tendido sobre el desplome de las bolsas chinas y la aversión al riesgo que han provocado.
“La corrección que estamos viendo en la bolsa china era previsible e inevitable, ya que las valoraciones habían subido sin que se produjera en paralelo una mejoría de los fundamentales. No obstante, la magnitud de la caída del mercado es mayor de lo que había esperado. También considero que esta oleada de ventas ha comenzado de forma indiscriminada, pero después de un tiempo, los inversores encontrarán empresas con valoraciones favorables y fundamentales atractivos y esas empresas serán relativamente inmunes a las fluctuaciones del sentimiento”, explica convencida de que en la renta variable del gigante asiático hay oportunidades mucho más a tiro ahora que nunca.
“La oleada de ventas me ha dado la oportunidad de aumentar la exposición a determinados títulos bancarios, ya que la corrección ha tirado a la baja aún más de sus valoraciones y descuentan con creces las expectativas de mayor competencia y aumento de la morosidad. También incorporé una posición en Dongfeng Motor Group, una empresa automovilística estatal, a la vista de su atractiva valoración. Esta compañía se beneficia de las reformas en marcha en el sector de las empresas estatales, mientras que sus socios históricos Honda y Nissan se han centrado en reducir sus stocks en China y renovar su gama de modelos SUV”.
Pero hay más, cuenta Ning, el Fidelity Funds China Focus Fund también ha incrementado la exposición a una selección de empresas de consumo básico, “un área que generalmente ha sido pasada por alto por el mercado debido a la competencia de Internet y las guerras de precios. Sin embargo, creo que las valoraciones no reflejan adecuadamente la mejoría de sus perspectivas de crecimiento”, dice.
La reducción de la exposición ha llegado via recogida de beneficios. La gestora de Fidelity reconoce que ha deshecho posiciones en acciones de clase A para recoger beneficios en posiciones que mantenía desde hacía mucho tiempo y que se habían anotado buenas ganancias, a medida que iban subiendo las valoraciones. Parte de esta reducción se realizó en fabricantes de equipos ferroviarios, que habían subido con fuerza al calor de las fusiones completadas recientemente en el sector y la mejoría del sentimiento después del anuncio de la iniciativa pública a largo plazo conocida como «One Belt, One Road».
Ning explica que este megaproyecto del gobierno chino, junto con los recortes de los tipos de interés son ejemplos de cómo el gobierno está respondiendo y gestionando las difíciles condiciones económicas.
“Las posiciones de la cartera en banca y seguros se beneficiarán de los cambios estructurales. Por ejemplo, me gustan las perspectivas de algunas aseguradoras que podrían beneficiarse de las bajas tasas de penetración y del impulso a las reformas en el sector. Del mismo modo, se espera que los pasos que ha dado el gobierno en el sector bancario para reducir el riesgo sistémico y restructurar la deuda de las administraciones locales ayuden a los bancos a eliminar posibles préstamos de dudoso cobro de sus libros, lo que debería contribuir a reducir la morosidad”, concluye la gestora.