ING IM estima que, en 2015, la deuda asiática obtendrá mejores resultados que los bonos de mercados desarrollados, gracias a la dinámica saludable del crédito empresarial, el apoyo de la liquidez global, entornos económicos y políticos estables y la demanda de rentabilidad por parte de los inversores.
La combinación de estos factores es para Joep Huntjens, Head of Asian Debt de ING IM, un punto a favor de la renta fija de la región. “A pesar de que una subida anticipada de tipos en Estados Unidos podría ser un obstáculo para los bonos asiáticos, es probable que la Reserva Federal retire su política monetaria de tasas cero gradualmente. Por otra parte, el impacto de esto se verá compensado por el colchón de ‘spread’ que ofrece el crédito y el high yield asiático, y la rentabilidad adicional ofrecida por los bonos en moneda local de la región».
ING Investment Management anticipa, en su último informe de mercados, que el crédito asiático, incluyendo deuda denominada en dólares, high yield y bonos en moneda local, ofrecerá una rentabilidad total del 8,6% en 2015, aunque el caso base se considere del 2,0 al 4,0%. Los bonos high yield asiáticos podrían arrojar rentabilidades del 11,4%, situándose el caso base entre el 5,3% y 7,3%.
Huntjens afirma que los países emergentes de Asia están preparados para generar la tasa de crecimiento global más rápida de la región mientras que China, India e Indonesia continúan con las reformas económicas. Los menores precios del petróleo y de las materias primas se traducirán en mejores balances externos y en menor inflación en la mayoría de las economías asiáticas y ofrecerán a los responsables de las políticas monetarias un mayor grado de libertad para promulgar políticas expansivas.
El riesgo clave para los bonos locales asiáticos, apunta el experto de ING IM, reside en el comportamiento de las divisas frente al dólar. “Las agresivas políticas de los bancos centrales dirigidas al crecimiento y a vigilar la deflación en Japón, Europa y otros lugares, son propensas a fortalecer al dólar. Sin embargo, el rendimiento es relativo, y frente a otras monedas emergentes regionales, como América Latina, Asia debería presentar resultados positivos dada su volatilidad media respectivamente inferior”, explica Huntjens.