Con una subida del 30% en dos meses, el Merval muestra el renovado optimismo que despiertan los valores argentinos, no solo localmente, sino también en los mercados internacionales. En este contexto, José Echagüe, analista de Consultatio Asset Management, asegura que “Argentina vuelve a la cancha” y que la clasificación como mercado emergente será un hecho el año que viene.
“Las acciones argentinas volvieron a tener esta semana un salto que casi duplica el retorno semanal en dólares obtenido por el promedio de mercados emergentes (6,2 en dólares contra 3,6%)”, asegura Echagüe, de confirmarse estos resultados, “la clasificación como mercado emergente que el pasado mes de junio se postergó por falta de certeza sobre la continuidad de las reformas, debería ser un hecho en 2018”.
Dentro de dos semanas se celebrarán elecciones de medio mandato en Argentina, unos comicios clave para determinar la gobernabilidad del país, ya que se renueva parte del Congreso. Y los sondeos muestran una ventaja del actual gobierno, considerado como favorable a los intereses de la industria financiera.
Para Consultatio Asset Management, “La apuesta (por Argentina) es bastante evidente en los precios y volúmenes operados. Los jugadores internacionales renovaron apuestas sobre el equity de una manera contundente, incluyendo la compra de ampliaciones de capital que realizaron varias compañías, en su mayoría del sector bancario. El racional es que con la inclusión en índices internacionales entra en vigor un flujo de demanda sostenido que da soporte a las valuaciones. Con este factor, las valuaciones todavía no están caras”.
Según el análisis de la administradora de fondos argentina, el sector energético y las acciones de los bancos reciben particularmente la atención del inversor extranjero. Los bonos en dólares también registraron mejoras esta semana, aunque más leves”
“La suba generalizada está reflejando el momentum extraordinario que están teniendo los flujos de fondos hacia el mundo emergente: en los primeros meses de 2017, estos países recibieron 92.500 millones de dólares sólo en bonos”, cuando el promedio anual de 2013-2016 fue de 10.650 millones.
Para Echagüe, lo más relevante no será sólo el resultado de las elecciones, “sino lo que el gobierno pueda hacer en términos de reformas con el capital político que obtenga el 22 de octubre”.
El pasado mes de junio MSCI echó un jarro de agua fría a las expectativas de los mercados y del gobierno argentino, que esperaba recuperar la categorización de “emergente”.
MSCI mantuvo al país como “mercado de frontera”, situación existente desde 2009.
MSCI señaló como positivos los cambios recientes en la economía argentina: “Desde diciembre de 2015 por el Banco Central Argentino que abolió las restricciones cambiarias y los controles de capital que habían estado en vigor en los últimos años. Esos cambios dieron como resultado entre otras cosas: «1) una moneda flotante; 2) la eliminación de los límites de reservas líquidas y repatriación de mensual que afectaban al mercado de títulos y 3), la eliminación de las trabas para la entrada y salida de inversión de capital», informó el banco en una nota.
Pero los analistas de MSCI consideran que la “irreversibilidad de los cambios recientes todavía debe ser evaluada».