A pesar del mejor comportamiento relativo de los valores tecnológicos durante los últimos años, las valoraciones siguen estando en línea con las medias históricas y el conjunto del mercado. Por eso, Hyun Ho Sohn, gestor del FF Global Technology Fund de Fidelity sigue siendo cautelosamente optimista sobre el sector.
“Los negocios subyacentes son sólidos en el sector, generan un buen volumen de flujos de efectivo y se sustentan sobre la innovación y la propiedad intelectual. Un aspecto destacable es que el mercado y los presupuestos a los que se dirigen los negocios tecnológicos están aumentando rápidamente a medida que la digitalización va ganando terreno y un amplio conjunto de sectores se hace más ‘inteligente’, explica el gestor.
Factores estructurales de crecimiento
Desde la perspectiva de los subsectores, Ho Sohn sigue encontrando una diversidad de oportunidades y cita como ejemplo los smartphones, donde el volumen total de terminales se desacelera pero el consumo de contenidos digitales crece exponencialmente.
Además, la incorporación de funciones adicionales en los smartphones, como los sensores, brindarán nuevas experiencias a los consumidores en el futuro y abrirán nuevas líneas de negocio. Algunas posiciones de la cartera, como Apple y Alphabet, que se han adueñado del ecosistema móvil, podrían ser grandes beneficiarias, cree.
“Este enfoque ha beneficiado a mis clientes. Desde que asumí la gestión, el FF Global Technology Fund se sitúa en el primer decil de su categoría”, afirma.
Para el gestor del FF Global Technology Fund, los cambios en la arquitectura informática también van a suponer una oportunidade de negocio. Se espera que la creciente adopción de la nube y los superordenadores, actúen como un vector de crecimiento estructural que mejorará las CPU, el almacenamiento, la conectividad y el software de gestión. Probablemente, dice, lo anterior también estimule la demanda de chips programables e interconectados de alta velocidad, que son componentes esenciales de estas tecnologías.
Alianza de los gigantes tecnológicos
La unión de Apple con Amazon, Google, Facebook, IBM y Microsoft, es decir, los pesos pesados de la tecnología a nivel mundial, para desarrollar la inteligencia artificial da idea de la apuesta que supone de cara al futuro. Además, todas en mayor o menor medida tiene programas de realidad virtual.
“Son tecnologías relativamente nuevas, están atrayendo un importante volumen de inversión y estimulando la demanda de aceleradores gráficos, chips de memoria y otros productos relacionados con semiconductores, y el fondo sigue estando sobreponderado en estos negocios”, explica Ho Sohn.
Otro motor de crecimiento estructural en la industria son las inversiones que están haciendo las empresas en su transformación digital en sectores tan diferentes como la industria manufacturera, la construcción, la agricultura, etc. El gestor de Fidelity apunta a que algunas empresas de software concretas tendrán un papel destacado en esta tendencia, que probablemente siga los pasos de lo que estamos viendo en la industria automovilística.
“Aunque todavía podríamos estar lejos de los coches plenamente autónomos, no hay duda de que los automóviles son cada vez más ‘inteligentes’ y que la cantidad de tecnología empleada en cada vehículo aumenta significativamente. Probablemente este fenómeno se replique en diversas áreas dentro de la tendencia general de digitalización”, concluye.