El Anuario de Rendimientos de la Inversión Global 2019 elaborado por Credit Suisse destaca que el español es el idioma internacional más hablado en el mundo después del inglés, y ocupa el cuarto lugar por número de hablantes nativos después del chino, el hindi y el inglés. Debido en parte a este motivo, España tiene una visibilidad y una influencia que trasciende las fronteras del sur de Europa y que es de gran relevancia para América Latina.
Si bien durante las décadas de 1960 y 1980 los rendimientos reales de la renta variable española estuvieron favorecidos por un mercado alcista y ocupaban el segundo lugar a escala mundial, en las décadas de 1930 y 1970 se registraron los peores rendimientos entre los países analizados.
Durante los 119 años que abarca el Yearbook, la prima de la renta variable española a largo plazo (medida en relación con los bonos) fue del 1,6%, inferior a la prima de cualquiera de los otros países cubiertos durante todo el periodo analizado. Aunque España se mantuvo al margen de las dos guerras mundiales, las acciones españolas perdieron gran parte de su valor real durante la Guerra Civil española (1936-1939), mientras que el regreso a la democracia en la década de los 70 coincidió con la cuadruplicación de los precios del petróleo, acentuada por las importaciones de las que España depende para cubrir el 70% de sus necesidades energéticas.
España ingresó en la Unión Europea en 1986. Resultó muy afectada por la crisis financiera global e hizo frente a un gran déficit presupuestario. Los bancos locales estuvieron expuestos al desplome de la industria inmobiliaria y de la construcción. Las medidas de austeridad que se adoptaron dieron lugar a una de las tasas de desempleo más altas de Europa. Sin embargo, la economía española está volviendo a crecer.
La Bolsa de Madrid se fundó en 1831 y actualmente ocupa el decimocuarto lugar en el mundo por tamaño, estimulada por un sólido crecimiento económico desde la década de 1980. Las principales empresas españolas mantienen una fuerte presencia en América Latina, combinada con una solidez cada vez mayor en los sectores de banca e infraestructura en toda Europa. Las cinco acciones más grandes del índice son Banco Santander (18% del índice FTSE Spain), Iberdrola (12%), Telefónica (10%), BBVA (9%) e Inditex (7%).