En Andbank son positivos con respecto a los mercados financieros de cara a 2025, hasta tal punto que aconsejan entrar en los momentos de volatilidad que se produzcan a lo largo del año. Eso sí, siempre que las correcciones se produzcan en zonas inferiores a los precios objetivos establecidos por la firma para los distintos índices mundiales.
Respecto a Estados Unidos, Álex Fusté, economista jefe y director de inversiones del Grupo Andbank, espera que el crecimiento de la primera economía del mundo alcance el 2% este año, y a pesar de este enfriamiento, «persiste la incertidumbre en torno al ritmo de los recortes de tipos en 2025 y las posibles medidas políticas del presidente Donald Trump». Fusté no espera una política arancelaria de máximos, sino el uso de las tasas comerciales como herramienta de negociación. Pero el experto es consciente de que «los riesgos ligados a las tensiones comerciales y a la inflación exigen una gestión prudente».
En este escenario, la Reserva Federal adoptará una actitud de «esperar y ver», para calibrar cuáles son los efectos de las medidas que tome la nueva Administración Trump. Por ese motivo, Fusté descarta que se lleven a cabo las cuatro bajadas de tipos de interés previstas para este año, sino dos recortes «o, incluso, uno». Este parón en el proceso de bajadas de tipos en un escenario en el que no existe recesión económica supondrá una subida de las tires de los bonos, de tal manera que el Treasury, a juicio del experto, podría escalar al 5%.
Respecto a la renta variable, los beneficios por acción de las compañías del S&P 500 puede aumentar un 10%, lo que daría gasolina al índice. Su posicionamiento en renta variable americana es neutral, aunque, por sectores, se inclinan por las tecnológicas y también ven oportunidades en compañías de pequeña y mediana capitalización. También tienen un posicionamiento neutral en bonos y en crédito con grado de inversión estadounidenses.
Por su parte, Marian Fernández, responsable de macro de Andbank España, apunta sobre el mercado europeo que los inversores estarán focalizados tanto en las políticas de Donald Trump como en las elecciones en Alemania y la falta de consenso político en Francia. La experta confía en que la locomotora alemana relaje las exigencias fiscales, de tal manera que un mayor gasto contribuya al crecimiento. Con todo, espera que el crecimiento económico europeo alcance el 1% con un fortalecimiento del consumo como principal apoyo.
El menor crecimiento y la necesidad de inversión para mejorar la productividad y no quedarse atrás en la carrera tecnológica obligará al BCE a bajar los tipos de interés, de tal manera, que a mediados de año, el tipo de referencia podría quedar en el 2%.
Este contexto implica un posicionamiento neutral en renta variable europea, con el índice Stoxx 600 como referencia, con el foco en sectores como defensa, ante la posibilidad de un aumento del gasto para cumplir las exigencias de la OTAN. Mientras, la firma infrapondera los bonos de gobiernos core, el tiempo que presenta un posicionamiento neutral o ligera infraponderación para la deuda de países periféricos.
Para España, la firma considera que con un BPA previsto de 1,072 euros para 2025, el Ibex cotiza a una relación precio/beneficios de 11,11 veces. «Esta valoración refleja unas expectativas de beneficios estables en un entorno económico favorable, lo que posiciona al mercado de renta variable español para un comportamiento positivo continuado a corto plazo».
Japón es uno de los mercados que agrada a Fusté. La razón reside en las reformas para impulsar la inversión en los mercados financieros, que «están dando resultados positivos», como el incremento de los splits de acciones que refleja el creciente interés de los inversores minoristas nacionales. Fusté sobrepondera la renta variable del país, mientras que infrapondera la deuda y la divisa niponas.
Con respecto a China, a pesar de los esfuerzos de Pekín por rejuvenecer sus mercados de renta variable mediante medidas de estímulo, persisten importantes retos, a juicio de Fusté. En el centro está el «capitalismo de los Juegos del Hambre», en el que Pekín impulsa una competencia feroz en sectores clave, que suele traducirse en un exceso de oferta de productores. Por eso, la firma se acerca a este mercado de forma sectorial, es decir, aquellos que quedan fuera del foco estratégico directo de Pekín, como casinos, plataformas especializadas de Internet; energía y educación.
Fusté también mencionó a Latinoamérica en la presentación de perspectivas. «La región va a pagar los platos rotos de las políticas de Trump», aseguró. Hizo mención, sobre todo, a Brasil, debido a un aumento de las incertidumbres derivadas de la falta de coherencia en los mensajes económicos del presidente Lula da Silva en los últimos tiempos. Un hecho que no suele ser habitual, según Fusté.
El efecto DeepSeek
La irrupción de DeepSeek ha cogido desprevenidos a los inversores, pero Fusté quita relevancia a este evento. incluso, cree que la fuerte caída de los mercados es solo una sobrerreacción y que ha abierto una ventana de oportunidad en los mercados de renta variable.
La materialización de un riesgo real relacionado con la supremacía de China en semiconductores requeriría evidencia concreta de que dispone de chips avanzados superiores a los actuales estándares de la industria. Sin embargo, el consenso predominante entre los expertos en semiconductores indica que, aunque China ha logrado avances notables en datos y algoritmos, sigue dependiendo de la tecnología extranjera en lo que respecta a semiconductores avanzados. Aunque China está avanzando en su ecosistema tecnológico, la supremacía en semiconductores avanzados sigue siendo una barrera estratégica que favorece a Estados Unidos, según el experto.