La publicación del Índice de Inclusión Financiera (IIF), realizado por el grupo financiero Credicorp y la firma de investigación de mercados Ipsos, reveló una persistente brecha de género. Pese a que la distancia entre los niveles de participación de hombres y mujeres en América Latina se acortó el año pasado, de todos modos, sigue existiendo, dejando la inclusión femenina en desventaja.
El informe explora la relación de las personas con el sistema y los productos financieros a través de tres dimensiones, el acceso, el uso y la calidad percibida, asignando puntuaciones a ocho países de la región: Perú, Chile, Ecuador, Colombia, Bolivia, México, Panamá y Argentina.
El estudio incluyó el sondeo de 13.473 personas mayores de 18 años, en formato cara a cara para todos los países excepto Panamá, durante julio del año pasado.
Según indicaron en su reporte, a nivel regional, el 23% de las mujeres se encuentra en un nivel “logrado” u “óptimo” de inclusión financiera. Esto quiere decir que tienen altos puntajes en las tres dimensiones evaluadas, con diversidad de productos y servicios financieros, un uso intensivo del sistema financiero formal y una evaluación positiva de las entidades del sector, como los bancos.
En contraste, los hombres alcanzaron un 28%, dejando la brecha en 5 puntos porcentuales.
Si bien esta distancia se acortó respecto de la medición de 2021 –que, cabe destacar, no contó con la medición de Argentina–, donde las mujeres marcaron niveles de 11% de inclusión, 10 puntos por debajo del 21% alcanzado por los hombres, la entidad destacó que las diferencias se mantienen. “Las desventajas de las mujeres se evidencian no solo en el resultado general, sino también en todas las dimensiones que lo componen”, agrega el reporte.
El estudio también destaca que, aunque “es una buena noticia que haya disminuido el porcentaje de personas en el nivel más bajo de inclusión financiera a nivel total respecto al estudio del 2021”, los hombres siguen mostrando mejores resultados. Los resultados muestran que 36% de ellos se ubican en ese nivel –caracterizado por personas poco incluidas en el sistema financiero, con bajos conocimientos y tenencia de productos–, mientras que las mujeres llegan a 42%.
El sondeo también ubicó que el uso, que analiza variables de transacciones básicas, ingresos y ahorros, está en el corazón de la brecha de género de inclusión financiera.
“Los puntajes en todas las dimensiones que componen el IIF han aumentado para la población total con respecto al 2021, pero el uso de productos y servicios financieros continúa siendo el componente en el que las mujeres tienen peores resultados versus el 2021. En este caso, 44% tiene un nivel bajo de uso de productos financieros, 34% en progreso y 22% logrado, frente a 38%, 35% y 27%, respectivamente, entre los hombres”, señala el informe de Credicorp e Ipsos.
En el desagregado por país –y en línea con sus resultados generales de inclusión–, Panamá y Chile lideran el ranking de mayor porcentaje de mujeres incluidas plenamente en el sistema, con 37% y 36%, respectivamente. Les siguen Argentina (28%), Ecuador (25%), Colombia (23%), México (22%), Perú (14%) y Bolivia (11%).