La gran pregunta que quieren contestar los economistas en este momento es si el ciclo económico actual todavía puede continuar o si estamos cada vez más cerca de una recesión. ¿Será en 2019? Desde Andbank creen que hay cuatro elementos que contribuyen a alargarlo y van desde el acceso ilimitado a contenidos, el almacenamiento de información, la inteligencia artificial o la impresión en 3D.
Además, Alex Fusté, economista jefe de la entidad, afirma que es clave identificar cómo se ha financiado este ciclo para determinar si habrá otra crisis financiera. «Si el ciclo se financia vía deuda y son los los bancos las que la compran, acabará afectando a la economía real. Una señal de que esto no ha sido así ahora es que el balance de los bancos no ha aumentado», explica durante un encuentro informativo.
En EE.UU., añade, el mercado laboral todavía puede ser una palanca de crecimiento económico a pesar de su baja tasa de desempleo. El principal indicador es que la tasa de participación ha subido hasta el 63% y está todavía lejos del 67% registrado en 2007. «Esto es importante porque indica que cada vez hay más personas que entran al mercado laboral», afirma.
En cuanto a Europa, en Andbank observan determinados «brotes verdes» de cara al segundo semestre del año después de una primer mitad algo decepcionante. «Estamos ante un alto en el camino más que ante un cambio de ciclo», afirma Mariam Fernández, responsable de estrategia para Andbank España.
Sobre las incertidumbres políticas en el viejo continente, Fernández cree que «están ya descontadas» y anticipa que tanto el Brexit como el BCE serán los temas centrales que nos van a acompañar el resto del ejercicio. «El esquema está claro en cuanto a la retirada gradual del QE, pero en cuanto a la subida de tipos de interés creemos que hay que irse más allá, hasta septiembre de 2019», sostiene Fernández.
Guerra comercial ¿Fuegos artificiales o riesgo real?
Entre los principales riesgos que amenanzan al crecimiento económico mundial están las tensiones comerciales entre EE.UU. y China. Cada vez está más claro que tendrá un impacto en el PIB que la mayoría cifra en el o,5% del PIB. Fusté explica que China no está en la mejor situación para enfrentarse abiertamente a EE.UU. por varios motivos. «China ha practicado la dilplomacia de las infraestructuras en la región asiática financiando proyectos en los países de su entorno para generar dependencia. Este comportamiento se está cuestionando y le resta liderazgo. Además, tiene necesidad de seguir comprando commodities para que su economía no se ralentice y para ello necesita dólares, lo cual únicamente consigue generando superávit comercial con EE.UU.», argumenta este experto.
Las únicas opciones del gigante asiático para ganar la guerra sería «desdolarizar» el mercado de commodities en la región sustituyendo el billete verde por el reminbi, algo que Fusté ve «muy improbable».
Burbuja en deuda europea y en Japón
Desde Andbank señalan otros riesgos que añaden incertidumbre a los mercados, tales como la burbuja de deuda en Europa que, «no nos gusta», asegura Fusté o la «historia interminable de la expansión cuantitativa de Japón».
Respecto a EE.UU. no creen que el bono a 10 años alcance una rentabilidad del 4%. «Vemos razonable un nivel del 3,2%. Ese es un nivel razonable para nosotros, un nivel comprador para los traders que ahora no pueden comprar», explica Fusté. En Andbank se muestran positivos en renta fija de IG (Investment Grade) y prefieren esperar en High Yield.
En Europa, prevén una rentabilidad para el bono alemán de entre el 0,5%-0,8% aunque creen que «el momento dulce para la compra de deuda periférica ha pasado y tenemos actualmente una aproximación táctica y no estratégica», añade Fernández. En crédito europeo reconocen que «no seremos muy compradores porque las valoraciones están ajustadas. Somos selectivos y nos quedamos con el sector industrial», concluye la experta.